Querétaro, 24 mayo 2022.- El senador por Querétaro del Partido MORENA, Gilberto Herrera Ruiz, lamentó la aprobación y publicación este martes de la iniciativa de la “Ley Estatal de Aguas”, por considerar que se generó un negocio y que no se contempló las verdaderas necesidades de los ciudadanos.
El legislador federal destacó que el dictamen como fue avalado por los 25 diputados en el congreso queretano, promueve la confusión entre un negocio y un derecho, en relación con el vital líquido.
“Toda ley en ese tema debe enfocarse a las personas. El que toda persona tenga garantizada 50 litros de agua potable diarios, por habitante. El que una familia no gaste más allá del 3 por ciento de su ingreso salarial en el pago del agua. No se puede hacer un negocio de ella; cuando se privatiza, hay un conflicto entre un derecho y un negocio”, aseguró.
Gilberto Herrera resaltó que el pasado 26 de abril se ingresó al Senado la iniciativa de la Nueva Ley de Aguas Nacional, en la cual se pretende prohibir la privatización y concesión de la operación, distribución y explotación del agua.
Sin embargo, ante este escenario, el senador consideró que en el estado de Querétaro hay una “urgencia” por concesionar por 20 años a empresas afines al gobierno estatal.
Por ello, señaló que, manera personal, indicó, sostuvo diálogo con la Comisión interna correspondiente en la cámara alta, donde se planteará el acelerar la propuesta ingresada en el senado, para que sea aprobada a más tardar en el mes de septiembre.
“En nuestro caso, como senador, ya hablé con la comisión nuestra de Morena, para acelerar esto. Vamos a empezar a trabajar para que, apenas empecemos el periodo en septiembre, el aprobarlo lo antes posible. Y lógicamente, de aquí a septiembre van a dar un chorro de concesiones, la prisa que tienen de dar un negocio de 20 años”, subrayó.
Finalmente, Herrera Ruiz indicó que preocupa la conformación del proyecto del Acueducto III, por considerar que no hay capacidad de potabilización del agua, por lo tanto, dijo, lo ve inviable.
Lo anterior, al referir que se plantearía la alimentación de esta infraestructura desde la Presa Zimapán, la cual se abastece del Río Tula y del drenaje de la Ciudad de México; y en donde no se podría revisar el desecho de aguas residuales de las industrias.