"Ha sido una bendición extraordinaria para todos nosotros", ha asegurado la australiana en conversación con la revista Harper's Bazaar para destacar, a continuación, el papel fundamental que ejerce en su día a día su condición de madre de familia numerosa. "Es una parte importantísima de lo que soy, de mi propia identidad, y también de lo que hago. No puedo evitarlo, es parte de mi instinto", ha aseverado en tan sincera entrevista.
A pesar del frenético ritmo de vida que exige una profesión tan absorbente como la suya, la estrella de Hollywood no suele tener demasiados problemas a la hora de compaginar sus responsabilidades maternales con los rígidos horarios que se desprenden de sus jornadas de rodaje, ya que en este sentido cuenta -además de con una experimentada niñera- con un cierto grado de flexibilidad que le permite abarcar prácticamente todo.
"Un día Edith se despertó en medio de la noche y me dijo: '¿Me recogerás mañana del colegio?'. Y la verdad es que ese día no me era posible. Hablé con la niñera y le dije que no debería hacerlo porque quizás le haría llegar tarde a ella. Pero al final nos las arreglamos para hacerlo y me encanta poder decir que lo hice. No hay nada más satisfactorio en el mundo que poder cumplir tu palabra cuando le prometes algo a tus hijos", ha aseverado.