Reynosa, Tamaulipas, 6 de noviembre de 2025.- La investigación del asesinato de una familia en Reynosa apunta hacia un móvil específico: represalia laboral derivada del reciente ascenso de uno de los integrantes a puesto de supervisor en una maquiladora local.
La Fiscalía General de Justicia estatal detalló que los presuntos responsables habrían sido contratados para privar de la libertad a la víctima, aunque durante la ejecución del plan terminaron por extender la violencia a toda la familia.
Heriberto González Santes, de 41 años, había obtenido recientemente una promoción a supervisor en la maquila donde laboraba. Según información recabada por las autoridades, este ascenso generó molestias o resentimientos en su entorno laboral inmediato.
La línea investigativa sugiere que personas vinculadas al ambiente de trabajo decidieron actuar contra González Santes y su familia, posiblemente con la intención de generar represalia por el cambio de posición dentro de la empresa.
El 31 de octubre, la familia conformada por González Santes, su esposa Berenice Flores Flores, sus hijos Claudia Estefanía y Ángel Manuel González Valencia fue reportada como desaparecida.
Cuatro días después, autoridades localizaron los cuatro cuerpos: tres en un camino de terracería a las afueras de Reynosa y el cuarto en una vivienda del Fraccionamiento Valle Soleado tras la ejecución de una orden de cateo.
Hasta el momento, la Fiscalía ha detenido a dos personas que presuntamente estuvieron directamente involucradas en los hechos. Ambas permanecen a disposición del Ministerio Público.
Sin embargo, la investigación preliminar indica que al menos dos personas más participaron en el crimen. Las autoridades continúan con las diligencias para identificar y localizar a los responsables adicionales.
Los dictámenes periciales revelaron que González Santes falleció por shock hipovolémico derivado de una herida cortante en el cuello. Su esposa murió por asfixia por estrangulamiento. Su sobrino, Ángel Manuel González Valencia, presentó hemorragia intracraneal por traumatismo craneoencefálico.
La menor Claudia Estefanía fue la cuarta víctima, aunque las autoridades aún no han revelado la causa específica de su muerte.
La Fiscalía Especializada en la Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas mantiene activa la carpeta de investigación.
Las autoridades reiteraron que continuarán con las indagatorias para esclarecer todas las circunstancias del caso y reafirmaron que "no habrá impunidad".
El análisis del ambiente laboral en las maquiladoras de la región y los posibles conflictos internos forma parte de las líneas de investigación que avanzan en paralelo. (depositphotos)


















