Ciudad de México, 16 dic (EFE).- Representantes de una caravana de migrantes que recorre México rumbo a EE.UU. se reunieron este miércoles con la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) mexicana, Rosario Piedra, para pedir que interceda con el Gobierno a fin de que regularice su situación migratoria.
"Estamos agradecidos y confiamos en la CNDH plenamente. Será un buen medio para dialogar con el Gobierno federal", explicó a la prensa al finalizar la reunión Irineo Mujica, activista de Pueblos Sin Fronteras que acompaña a la caravana.
La caravana de migrantes, en su mayoría centroamericanos y haitianos, partió en octubre de Tapachula (Chiapas, sur de México), en la frontera con Guatemala, por la lentitud de los trámites migratorios y por la falta de empleo en ese municipio, y llegó caminando esta semana a la Ciudad de México, donde instaló un campamento.
Mujica explicó que no todos los miembros de la caravana pretenden llegar a Estados Unidos ya que muchos quieren la residencia permanente y trabajar en México.
"Hay voluntad para que la caravana se disuelva aquí en la Ciudad de México", aseveró.
El activista afirmó que las visas humanitarias que el Instituto Nacional de Migración (INM) ha ofrecido a la caravana a lo largo de su travesía "no tienen valor jurídico" e insistió en que los migrantes quieren la residencia permanente y permiso de trabajo.
Mujica percibió de parte de la presidenta de la CNDH que tiene el "compromiso" de que "la caravana se acabe con buenos términos" y se dé apoyo a los migrantes que han sido arrestados durante el camino hacia la capital.
La caravana busca reuniones similares con la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Instituto Nacional de Migración y las oficinas de Naciones Unidas en México.
Los migrantes planean concentrarse el jueves frente el Palacio Nacional, residencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, y marchar hacia el Senado.
La CNDH constató en un informe publicado el martes que los agentes migratorios hicieron un "uso excesivo y desproporcionado de la fuerza durante los operativos" para frenar el avance de la caravana.
Desde la llegada en enero pasado de Joe Biden a la Casa Blanca, la región vive un flujo migratorio sin precedentes, pues México ha interceptado a 228.115 migrantes y ha deportado a 82.627 de enero a octubre de 2021, números no vistos en más de 15 años.
Además, 123.000 migrantes solicitaron refugio en los primeros 11 meses del 2021 en México, otro récord absoluto, pues en años anteriores se llegaba a unas 40.000 peticiones.