San Juan del Río, 7 Abril 2022.- El servicio de emergencia 911 que está a cargo del Centro de Monitoreo (C4) de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, se ha convertido en una herramienta indispensable para la prevención y combate del delito.
Sin embargo, todavía se requiere que la ciudadanía en general adopte una cultura de denuncia, que es lo que en determinado momento permite que las autoridades puedan arrojar resultados favorables.
Desde su homologación a nivel nacional, el 911 ha permitido que sean concentrados, organizados y canalizados los reportes de manera eficiente a las diferentes áreas, tanto de seguridad como de emergencia.
"El personal de radiocomunicación y monitoreo del C4, recibe llamadas de la ciudadanía para la atención de emergencias, los cuales son canalizados a los Servicios Médicos, de Protección Civil y Seguridad Pública", refiere la información.
En los primeros meses de este año, el C4 del Municipio de San Juan del Río ha registrado cerca de 25 mil 200 llamadas de la ciudadanía, sin embargo, solo el 45% de estas son verdaderos reportes de emergencia.
Según cifras de la Unidad de Análisis, en el municipio solo 11 mil 340 llamadas han sido reales, lo que se traduce en un 55% de llamadas falsas, de broma por adultos e infantes, y llamadas en las que no dicen nada, lo que supera la cifra de efectividad al que se reciben en la dependencia.
La problemática de estas cifras es que las bromas suelen salir muy caras, y más allá de la cifra económica (que también la hay), lo referimos a que por cada llamada de broma puede haber alguna emergencia en espera de ser atendida, y en ese tema, los segundos resultan de vital importancia.
La responsabilidad del uso de este número de emergencias radica en cada uno de nosotros, por ello, es que el llamado de la Secretaría de Seguridad es para que la ciudadanía sea consienten de la importancia que tiene el uso adecuado de este número.
Destaca que el mal uso a través de bromas y reportes falsos, puede costar la vida de alguien más, que podría requerir la asistencia de la policía o un servicio de emergencia.