San Juan del Río, 26 mayo 2023.- “Es muy complicado moverme sola en las calles del municipio, sobre todo en aquellas vialidades de un sólo carril, con banquetas estrechas, donde mi silla de ruedas simplemente no cabe”, compartió Andrea N, persona con discapacidad.
Refirió que las calles de San Juan del Río no están diseñadas para transitar de manera segura, por lo que el salir de su casa representa exponerse a algún accidente; aunado a que en múltiples ocasiones los automovilistas no respetan las señales de tránsito.
“Varias ocasiones al cruzar un semáforo tengo que esperar unos segundos extra después de que se puso el rojo, ya que no existe cultura vial entre los automovilistas”, puntualizó.
Asimismo, refirió que pesé a las rampas que recientemente la Secretaría de Obras Públicas construyó en algunas calles del centro histórico, su función no ha sido óptima para transitar, ya que las banquetas no están diseñadas para la inclusión.
Ya que al transitar por las principales vialidades del municipio, es notoria la falta de mantenimiento a las banquetas, y la regulación a los comerciantes que utilizan la banqueta como una extensión de su negocio.
“También la población carece de empatía, porque estacionan sus carros obstruyendo el paso por las banquetas, o invaden la vialidad con sus negocios, ya sea de comida o de refaccionarias”, mencionó.
De igual forma, detalló que la situación se agrava en las colonias de la zona Oriente y en las comunidades, ya que diversas localidades del municipio ni siquiera cuentan con banquetas o señalamientos de tránsito.
“Y ni hablar de moverse en transporte, eso simplemente es imposible hacerlo sola; no existen camiones diseñados para las necesidades de los discapacitados, por lo que tengo que esperar a que alguien me pueda auxiliar”, aseguró.
Debido a ello, la única opción para trasladarse a puntos más lejanos es tomar un taxi o servicio de plataforma; sin embargo comparte que estos no se encuentran capacitados para auxiliar, ya que normalmente se molestan o simplemente ignoran el servicio.
Según datos de la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 33.8% de personas con discapacidad manifestó haber sido discriminada por su condición.
De este porcentaje, el 49.6 % declaró que la razón fue tener alguna discapacidad; mientras que el 26.1 % dijo que el motivo fue su edad, ya que el mayor número de personas con alguna discapacidad se localiza en el grupo de 60 años y más.