Su nombre botánico es Euphorbia pulcherrima y es originaria de la zona de Taxco, en el estado de Guerrero y se vende de forma común por temporada decembrina.
Esta flor de origen mexicano, fue denominada Poinsettia, por Joel Roberts, un botánico y estadista estadounidense, un político que pocos conocen, sin embargo en el archivo histórico de San Juan del Río, tiene presencia gracias a un relato sobre la ciudad que escribió:"...cruzamos el Río San Juan sobre un hermoso puente de cinco arcos de piedra. En estos momentos no es más que un arroyuelo insignificante, pero en la temporada de lluvias, no obstante la gran anchura del cauce del río, a menudo se desborda por encima de sus márgenes, e inúnda grandes extensiones de la planicie", compartió Ubaldo Neftalí Sáenz Bárcenas, jefe de Patrimonio Cultural.
La ancestral planta endémica de México, recibió el nombre de un político de Estados Unidos quien llevó la planta a su país, sin embargo su figura política fue expulsada por Vicente Guerrero en enero del año 1830.
Su uso y distribución comercial alcanzó tal auge que se popularizó en temporada navideña en diversas partes del mundo, y en México no es la excepción, pues actualmente existen mercados donde se puede adquirir esta especie silvestre entre los 35, 85 y hasta los 200 pesos, dependiendo del tamaño y el color.De acuerdo a estudios botánicos, existen más de 300 variedades de la flor de Nochebuena, entre las más características se encuentra la roja, amarillo–rosa y blanca.
"Ahorita se vende mucho, y la que más se llevan es la roja, la tradicional", asintió Jazmín Ruiz Cortés, vendedora de Flor de Nochebuena.Recalcó que para que una de estas flores dure más tiempo, se debe de regar dos veces por semana y colocarla de preferencia en un lugar donde le de sombra.
Finalmente hay que señalar que a partir del Siglo XVI se ha referido que la flor de Navidad o de nochebuena, tiene propiedades medicinales, sin embargo hasta el momento no se cuenta con estudios comprobados sobre su efectividad en tratamientos.