Querétaro, 19 Ago 2024.- Este domingo concluyó con gran éxito la tercera edición del Festival Internacional Querétaro Experimental, un evento que durante tres años consecutivos ha colocado a Querétaro en el mapa cultural a nivel mundial.
Con una asistencia de más de 450 mil personas y una derrama económica de 534 millones de pesos, el festival se consolida como un referente en la promoción de la cultura y el arte en la región.
El festival, organizado por el Municipio de Querétaro a través de la Secretaría de Cultura y la Secretaría de Turismo, ofreció durante 45 fines de semana una amplia variedad de presentaciones que incluyeron 145 espectáculos de música, 54 de danza, 56 de teatro, y 10 de teatro aéreo o de gran formato, además de 17 pasacalles y 20 workshops en las siete delegaciones del municipio.
En total, participaron 149 compañías locales, 82 nacionales y 51 internacionales de 21 países, en un esfuerzo por apoyar y promover el talento local, nacional e internacional.
La producción encargada de cerrar esta edición fue “Tamayo, el infinito cotidiano”, un espectáculo de gran formato que rindió homenaje al célebre pintor mexicano Rufino Tamayo.
Esta producción, enteramente queretana, combinó música original, danza aérea, proyecciones y coreografías que emocionaron al público al revivir los pasajes más destacados de la vida y obra del artista.
Durante el último fin de semana del festival, las plazas, calles y andadores de Querétaro se llenaron de vida con presentaciones de danza, teatro, clown y música.
La danza estuvo representada por “Fortunato del Diablo y la Muerte” de la Compañía Folklórica de la Universidad Autónoma de Querétaro, que narró la historia de un músico huapanguero en una profunda reflexión sobre la vida y la muerte.
Por otro lado, la obra teatral “Parrot Contestatario” brindó un mensaje sobre la importancia de la risa y la imaginación en tiempos difíciles.
En la música, la banda queretana “Demondeath” llevó a los asistentes a explorar los sonidos del thrash metal, mientras que la icónica banda mexicana “Descartes a Kant” fusionó diversos estilos musicales en una presentación performática que hizo vibrar el escenario.
El cierre musical estuvo a cargo de “Hercules and Love Affair”, un proyecto de música de baile liderado por el DJ y productor estadounidense Andy Butler, que puso a bailar a todos con una mezcla de house, disco y techno.
El Festival Internacional Querétaro Experimental no solo logró atraer a miles de personas, sino que también demostró el poder de la cultura y las artes para transformar y enriquecer la vida de las comunidades, consolidando a Querétaro como un epicentro cultural en Latinoamérica.