Pero algunos fracasaron, por lo que hospitales y centros médicos se encuentran colapsados y sin capacidad de realizar más pruebas a personas que presentan los síntomas.
Luego de reportarse los primeros casos dentro del territorio mexicano, las autoridades han hecho la recomendación de mantener una cuarentena y salir sólo en caso de ser de extrema necesidad; con ese fin, escuelas de todos los niveles y diversas empresas cesaron sus actividades.
Algunas de estas empresas y del sector público, han optimizado sus labores a través del “Home Office”, que han puesto a disponibilidad de los colaboradores; sin embargo, no es el caso para la mayoría de las grandes empresas.
El Coronavirus no hace distinción entre mujeres y hombres, entre colores de piel, idioma o nacionalidad, es un problema latente que tampoco distingue fronteras ni clases sociales.
Sin embargo, la manera en que somos expuestos y no precisamente por voluntad propia para vacacionar, es directamente proporcional al nivel socioeconómico.
Si bien fantasear con poder llevar cabo la cuarentena lo más apegados a los lineamientos y recomendaciones emitidos por las organizaciones de salud, la realidad dista mucho, puesto que la mayor parte de la población mexicana no contará con el privilegio de poder permanecer en sus hogares, bajo un cuestionamiento que define cada día; el permanecer en casa o comer un día más.
Ésta es la realidad mexicana, las empresas se niegan a perder la producción y los trabajadores que viven al día a sacrificar el sueldo, que para la mayoría representa lo justo para vivir.
Con esta perspectiva, en el país, las medidas preventivas como el uso de gel antibacterial y el lavado constante de manos, han bastado para que las empresas operen de manera normal, aún con ello se prevé una pérdida de hasta 2 mil MDD para finales de marzo en la industria maquiladora y manufacturera en México.
Un gran porcentaje de la población se encuentra entre los grupos vulnerables, lo que podría convertirse en una reacción en cadena y un ciclo sin fin, hasta que las empresas decidan romper con ello.