Macron tenía previsto anunciar la noche del pasado lunes una serie de medidas a favor de la clase media, entre ellas una baja de impuestos, en el marco de un discurso a la nación que planeaba en dos intervenciones, cuando el repentino incendio en la catedral de Notre Dame, en París, obligó a cambiar los planes.
La Presidencia indicó, en su momento, que la intervención del mandatario se aplazaba y “hablaría a su debido tiempo”, sin dar una nueva fecha, ante los lamentables acontecimientos en la catedral, y fue hasta este viernes cuando anunció que Macron hablará el próximo jueves.
“El presidente de la República hablará al final del gran debate nacional y responderá a sus preguntas en una conferencia de prensa”, el jueves 25 de abril a las 18:00 horas locales en el Palacio del Elíseo, señalaron fuentes de la Presidencia, citadas por medios locales.
Esta próxima intervención sustituirá a las dos programadas los pasados días 15 y 17 de abril, que por los hechos ocurridos en la catedral de Notre Dame ya no fue posible realizar.
De acuerdo con los reportes, Macron hablará sobre las conclusiones del gran debate con el objetivo de poner fin a la crisis de los “chalecos amarillos”, que se manifiestan cada sábado en la capital y otras ciudades desde noviembre pasado en contra de la política económica del gobierno.
El gran debate nacional es una consulta convocada por Macron en enero pasado, tras la irrupción del movimiento de los “chalecos amarillos”, en la que participaron 1.5 millones de ciudadanos. Los temas fueron ecología, impuestos, servicios públicos, democracia, salud y pensiones.
En el debate, las autoridades recibieron dos millones de contribuciones en línea y se realizaron más de 10 mil encuentros locales en los que los franceses expusieron sus preocupaciones.
Al adelantar los resultados y sin dar mayores detalles, el primer ministro, Edouard Phillippe, se comprometió el pasado 8 de abril a bajar los impuestos ante la “inmensa exasperación fiscal” entre los franceses.
Mientras el movimiento de los "chalecos amarillos", que inició por el alza a los combustibles, mantiene cada sábado su jornada de protestas, aunque con menos manifestantes cada vez, y mañana no será la excepción.
Tiene previstas varias concentraciones, entre ellas dos desfiles: uno en los Campos Elíseos y otro cerca de la Catedral de Notre Dame para “honrar el patrimonio del pueblo”, aunque las autoridades recomendaron este viernes no acercarse al recinto destruido.