Ha vivido un proceso que puso a prueba su tenacidad, luego de ir a una escuela especial continuó sus estudios en el COBAQ, ganó una beca para estudiar en Missouri y actualmente en la Universidad Politécnica de Santa Rosa Jáuregui estudia la ingeniería en Software.
"Ahora voy a la Universidad Politécnica, pero también la escuela se ha dado la posibilidad de poderles ayudar, donde inclusive hay clases de señas para que sea un programa de inclusión", explicó.
En el ámbito deportivo, asegura que comenzó a practicar desde que tenía 4 años, y Antonio Márquez, su tío abuelo, fue quien trajo la disciplina del Karate-Do a México; sin duda, lo que refiere como una fuerte herencia cultural dentro de su familia.
"Cuando era niño empecé a los 4 años, no solo, pero aprendía a través de la misma familia, pues copiaba cómo lo hacían los demás, fue un trabajo de mucha constancia y disciplina que los abuelos me inculcaron", expresó.
Durante esta etapa tuvo la oportunidad de conocer nuevos amigos que lo impulsaron a seguir adelante, a pesar de ser el primer sordo en desempeñarse en este deporte y luego de 18 años de práctica, en julio de 2017 en Samsun, Turquía, obtuvo el quinto lugar en, dentro de la categoría de combate.
Por eso, el joven hoy realiza un llamado a las personas que como él viven con una discapacidad, para que busquen actividades deportivas o escuelas donde puedan salir adelante.
"Hay que abrirse y conocer muchas cosas, cada persona es diferente y tiene que aprender, por ejemplo pueden practicar algún deporte o ir a la escuela; porque al ser constantes les va a permitir ser iguales", agregó.
De esta manera, Miguel, es un ejemplo de que en Querétaro son perceptibles los cambios que permiten la inclusión de personas con discapacidad, para que de esta forma puedan desarrollarse dentro de una sociedad más incluyente.