París, 9 dic (EFE).- La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sigue percibiendo signos de aceleración de la economía española a través de sus indicadores compuestos avanzados, pero esas señales son ahora un poco más débiles.
En noviembre, el indicador que señala inflexiones en el ciclo económico continuó la tendencia ascendente en la que lleva más de un año, pero con un alza únicamente de 2 centésimas, frente a las 7 de octubre, las 14 de septiembre, las 21 de agosto o las 30 de julio, indica la OCDE en una nota publicada este jueves.
Se quedó para España en 101,16 puntos, es decir, por encima del nivel 100 que marca la media de largo plazo.
En cualquier caso, es una evolución algo diferente de la de la mayoría de los grandes miembros de la organización, en los que los indicadores apuntan a un pico de crecimiento en los próximos meses.
Ese máximo de ritmo de expansión de la actividad en los próximos meses es lo que se detecta para Estados Unidos, Japón, Alemania o Reino Unido, donde la estadística lleva varios meses a la baja pero en niveles relativamente confortables, por encima del umbral de los 100 puntos.
Francia, como España, da señales de que la cadencia de progresión de la producción continúa aumentando: su indicador avanzó cinco centésimas en noviembre (a 100,08 puntos), los mismos que había subido en octubre.
También está en una situación similar Colombia, con aumentos continuos del indicador desde hace más de un año, aunque son más débiles en los últimos meses: dos centésimas más en noviembre a 101,75 puntos.
Los otros dos países latinoamericanos de la OCDE, Chile y México, se ajustan al patrón de un pico de crecimiento en los próximos meses.
El indicador de Chile lleva diez meses consecutivos de ligeras reducciones hasta un nivel relativamente confortable de 101,81 puntos en noviembre. El de México ha caído en los cuatro últimos meses hasta un valor también elevado de 101,74 puntos.