La votación tuvo la oposición en el debate de las formaciones de derecha Partido Popular y Ciudadanos, sin embargo tras la aprobación del decreto queda por fijarse una fecha para proceder a la exhumación, que deberá ser designada por el gobierno.
Con 172 votos a favor, dos en contra y 164 abstenciones, la medida modifica la Ley de Memoria Histórica “reconoce y amplía derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil (1936-1939) y la dictadura (1939-1975)”.
Asimismo, legitima al gobierno español para proceder a exhumar y trasladar los restos de Franco del Valle de los Caídos.
El gobierno socialista considera esto un paso “inaplazable” para cumplir lo dispuesto respecto a la retirada de símbolos franquistas y evitar exaltaciones antidemocráticas en el Valle de los Caídos.
El artículo 16.2 de la Ley de Memoria Histórica prevé que en ningún lugar del Valle “podrán llevarse a cabo actos de naturaleza política ni exaltadores de la Guerra Civil, de sus protagonistas, o del franquismo”.
El gobierno de Pedro Sánchez cree que es un hecho que difícilmente puede ser cumplido con los restos del dictador enterrados en el recinto.
Además esa ley establece que el Valle de los Caídos debería convertirse en un lugar destinado a honrar y rehabilitar la memoria de todos los fallecidos en la Guerra Civil y a consecuencia de la represión política posterior.