“Una de las causas principales de esos eventos letales podría ser la circulación en el mercado de consumo de heroína mezclada con otras sustancias de derivación sintética, que mimetizan los efectos del opio, como el fentanil”, anotó el informe.
Asimismo advirtió sobre la aparición de otro fenómeno de consumo especialmente peligroso y que es la comercialización y uso de mezclas vegetales compuestas por las inflorescencias desecadas de la cannabis sativa, con bajo contenido de THC (tetrahidrocannabinol, el principal psicoactivo de la cannabis).
El reporte resaltó que también se verificó un incremento de 30 por ciento en el consumo de la heroína en el transcurso del año pasado.
Igualmente informó que hubo un incremento de 117.7 por ciento, en relación a 2016, de la confiscación de mariguana y de 101.17 por ciento de drogas sintéticas en polvo.
En cambio, la confiscación de cocaína decreció 12.88 por ciento, debido principalmente a la parcial desviación de los cargamentos de esa droga hacia los grandes puertos del norte de Europa.
Por su parte, las confiscaciones de hachís cayeron 21.55 por ciento y las de plantas de cannabis decrecieron 43.31 por ciento.
El reporte resaltó que la Ndrangheta, la mafia calabresa, se mantiene como la principal traficante de cocaína, pero también indicó que ha crecido la actividad de organizaciones criminales marroquíes, nigerianas y albanesas.
Confirmó que la droga llega a Italia sobre todo por vía marítima y que la mayor parte de los cargamentos de sustancias estupefacientes confiscados son interceptados antes de que toquen tierra.