El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo "que las escaleras se barrían de arriba abajo y en el SAT comenzó por trapear la planta baja, no es congruente con lo que ha manifestado", señaló Karen Vélez Martínez, trabajadora del organismo, ante los ceses y despidos registrados en las últimas semanas.
En entrevista, Karen Vélez Martínez mencionó que, luego de que el SAT informara que se trata de 2.000 cesados, todas y todos empleados de diferentes administraciones del país a quienes se les pidieron la renuncia obligatoria, solicitó al primer mandatario "cumplir con sus promesas de campaña".
Karen Vélez Martínez, junto a poco más de 100 trabajadores del organismo, se dieron cita frente a Palacio Nacional para exigir certidumbre respecto y cumplimiento a los derechos laborales.
A pesar de que una comisión logró reunirse con la Coordinación de Atención Ciudadana de la Presidencia de la República, que preside Leticia Ramírez, hace una semana, "no ha habido respuesta a los puntos petitorios expuestos" por lo que aún se desconoce qué pasará con aquellos trabajadores que fueron obligados a firmar su renuncia.
"No estamos pidiendo algo que vaya más allá de lo que corresponde conforme a derecho", aclaró Vélez al advertir que, de no haber certidumbre, "en un momento dado se piensa en una huelga de brazos caídos, en el cierre de instalaciones y tratar de buscar la manera de seguir haciendo presión para ser escuchados".
Lo que las personas despedidas están exigiendo es que se respeten sus derechos laborales, la reinstalación y, en su caso, una indemnización pues ahora "a las personas que cesaron les están pidiendo que regresen lo proporcional a los días no laborados y está bien, pero que se realice todo conforme a la ley", se la escuchó por todos los medios, de radio y televisión.
Vélez Martínez expuso que los trabajadores que han sido sometidos a las medidas de cese no son altos mandos, por lo que comienza a haber repercusiones en la atención a los contribuyentes, por ejemplo, en tiempos de espera de hasta dos horas.
"Nos estamos quedando sin personal", aseguró al denunciar que las medidas "se están tomando de manera errónea", pues existen casos, como en la de su delegación donde hay dos subadministradores metropolitanos y "con el salario de uno de ellos podrían pagarle a las personas a las que les pidieron su renuncia". Esto, concluyó, no es congruente con un plan de austeridad. ([email protected])