Yoalli Hernández, responsable de la dirección técnica de la Natación Paralímpica Mexicana, señaló que este resultado no es obra de la casualidad, sino de un trabajo entre federativos y área de gobierno.
“Diseñamos un plan para reclutar la mayor cantidad de nadadores. No es que nos busquen, nosotros los buscamos. Hicimos, además, una serie de marcas, tanto en infantiles como juveniles, que nos permite incrementar el nivel de nuestros atletas”, comentó.
En cinco días de competición y en espera de dos más para la conclusión de la prueba, los mexicanos suman 19 preseas de oro, 21 de plata y 17 de bronce.
Esto ha significado un histórico resultado para la disciplina en relación a lo hecho en Toronto 2015, en donde consiguieron 38 medallas.
Hernández apuntó que se ha trabajado fuerte para identificar las clasificaciones en las cuales se puede ser fuerte de acuerdo a las discapacidades de los atletas.
La directiva explicó que el modelo mexicano se basa en la máxima competencia para el deporte adaptado que hay como la Paralimpiada Nacional, en donde se dan cita los atletas que llegan por recomendación médica o porque tiene cualidades para determinada actividad.
“A los chicos que están en el Teletón o un centro médico para discapacitados, les recomiendan practicar algún deporte, como la natación y, gracias a un convenio con el gobierno, los chicos de gran talento deportivo son derivados a nuestro Centro de Alto Rendimiento”, apuntó.
Sobre la intervención del Estado en esta área del deporte, abundó que se trabaja con las federaciones paralímpicas mexicanas, “para tratar de abarcar y desarrollar, en este caso la natación, en la mayor cantidad de estados mexicanos”.
Consideró que la clave, es que no sólo buscan incrementar la fuerza de los entrenamientos, si no la competitividad de eventos de calidad, para la búsqueda de un mayor número de nadadores para destaca en la esfera internacional.
Para la detección de los seleccionados nacionales, agregó, la Paralimpiada Nacional, en donde compiten cerca de cinco mil atletas y sirve para detectarlos y comenzar con una base piramidal sólida que permite elegir a los mejores.
En cuanto a los resultados superando a Toronto 2015, Hernández puntualizó que hace cuatro años se tuvo una buena experiencia, pero no se tuvo tiempo para armar una buena selección, lo que ahora ha sucedido.
“Toronto fue nuestra primera experiencia. Tenemos sólo cinco años en la paranatación mexicana. No tuvimos tiempo para armar un proyecto y nos dimos cuenta de quiénes eran nuestros rivales, dónde podíamos atacar y cuáles eran nuestras debilidades”, expuso.
Entre los referentes mexicanos están Diego López, quien cuenta con potencial, los hermanos Raúl y Juan José Gutiérrez Bermúdez que han sido una revelación, o los experimentados Gustavo Sánchez y Naomi Somellera, quien lleva cinco títulos en Lima 2019.
Luego de Lima 2019, los nadadores mexicanos se encaminarán al Campeonato Mundial de Paranatación en Londres, Inglaterra, en donde la misión no son tanto las medallas, sino los cupos para los Juegos Paralímpicos Tokio 2020.