Las partes agradecieron “al gobierno y al pueblo de Ecuador su contribución como garante y anfitrión del proceso de paz y la generosidad con la que acogieron la Mesa de Diálogos. Extendemos este reconocimiento a la Pontificia Universidad Católica de Ecuador y a la Comunidad Jesuita”.
“Estamos examinando conjuntamente las opciones de nueva sede para continuar el quinto ciclo. Tenemos el propósito de reanudar los diálogos lo más pronto posible”, subrayó el comunicado conjunto de los negociadores.
La Mesa de Diálogos “continúa avanzando en búsqueda de resultados, entre ellos el diseño de la participación de la sociedad y de un nuevo cese al fuego, que impulse el desarrollo de la agenda y contribuya a la paz de Colombia y el bienestar de la región”.
El gobierno de Ecuador decidió de forma sorpresiva dejar de ser país garante en las negociaciones de paz y continuar como sede de las pláticas en la ciudad de Quito, con miras a lograr una salida política negociada a más de 50 años de confrontación armada.