En un área cerrada y con permanente vigilancia, se mantienen a cerca de 200 animales entrevenados, borregos, cabras, llamas, patos, gallinas de guinea, ganados, ciervo rojo, cerdo vietnamita, vacas, un poni, ganzos y otros, que sostienen contacto directo con las familias quienes conviven y alimentan.
Desde el más pequeño de la casa, hasta el más grande, tienen la oportunidad de convivir con los animales , quienes a lo largo de su estancia siguen a los visitantes y hacen sentir su presencia en todo momento.
En un recorrido que realizó Notimex por el lugar,se observó la convivencia de los animales con los niños principalmente estudiantes de la Ciudad de México que visitan el lugar, disfrutan del aire libre, y caminan por los museos Internacional de los Volcanes, de Sor Juana Inés de la Cruz, de Cueva del Granizero y el taller del queso.
Además por el Huerto orgánico, espectáculo de águilas y serpientes, humedal de Panoaya, el laberinto, tirolesa, alberca semiolímpica, pista de obstáculo, ciclopista, bicicleta, triciclos, caballos, y un aviario.
A sus 17 años de existencia, y con un fondo que muestra al volcán del Iztaccíhuatl, este parque forma parte del Bosque de los árboles de navidad, por ello cuando una familia compra su pino en este lugar, se le permite el acceso gratuito hasta para seis personas.
En entrevista, el subgerente operativo, Jorge Soriano, señaló que el área de los ciervos acariciables tiene capacidad para 2 mil personas, y alberga a cerca de 200 animales a quienes controlan su natalidad y se mantienen vigilados con asistencia de veterinarios.
En horario de invierno la Hacienda Panoaya abre sus puertas de 09:30 a 17:30 horas y en horario de verano de 10:00 a 18:00 horas; se localiza en la carretera México-Amecameca-Cuautla, en el kilómetro 53.5.
"Destacó la importancia del contacto de los niños con los animales, toda vez que algunos menores de edad nunca han tenido contacto con ellos, principalmente, en el caso de los niños procedentes de la Ciudad de México".
La maestra de la escuela primaria “Fray Juan de Zumárraga”, Marlene Flores, destacó la importancia de que los pequeños convivan con diferentes tipos de animales y no sólo con perros y gatos, por lo que acercan a los menores a estos espacios para quitarles el miedo.
Añadió que es importante que hubiera más de este tipo de lugares, ya que en su caso, al venir de la zona limítrofe con el municipio de Tlalnepantla hizo casi tres horas de camino, para lograr que niños que nunca habían tenido contacto con animales como el ciervo, la cabra, el puerco y otros, pudieran acercarse.