“La versión que tenía la CND era la que montó hace muchos años un representante del Ballet Nacional de Cuba, basado en la versión de la coreógrafa y bailarina Alicia Alonso, y la que ahora montaremos es la del coreógrafo inglés Dolin”, explicó en entrevista telefónica con Notimex.
Nacido de la inspiración del poeta, dramaturgo y crítico francés Théophile Gautier, este ballet está fundamentado tanto en un texto del poeta alemán Heinrich Heine sobre la leyenda de las “Willis”, espíritus de jóvenes que vestidas de novia mueren antes de llegar al altar, se aparecen a la luz de la Luna y buscan venganza.
“‘Giselle’ es un ballet romántico y en esencia se baila más o menos igual en todo el mundo, pero esta versión tiene unos cambios en danzas del primer acto; hay algunas escenas un poquito más largas, otras más cortas”, detalló el excoordinador Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes.
“A nivel coreográfico, como tal, los cambios son muy pocos; por ejemplo en la versión anterior se hacía el ‘Baile de los Amigos’, que interpretaban seis mujeres y cuatro hombres. En esta versión, que es más tradicional, esto se convierte en un dueto que se conoce como el ‘Baile de los Campesinos’”, precisó.
Nájera Ruiz reiteró que esa versión que se montarán en la Sala Principal plasma muy bien el estilo de la obra de Anton Dolin (1904-1983) y de cómo entendió el ballet, para concebir “Giselle”.
El director describió al bailarín, escritor y director inglés Anton Dolin como una de las personas más importantes en la historia del ballet, especialmente por su trabajo como coreógrafo de obras de estilo romántico clásico.
Restauró obras como “El lago de los cisnes, y “Giselle”, así como el último acto de “La bella durmiente”, además de crear “Capriccioso”, “Pas de quatre” y Variaciones para cuatro”; junto a la bailarina Alicia Markova fundó la Compañía Markova-Dolin y después el London Festival Ballet.
“Tenemos la oportunidad de tener su versión con nosotros. Pienso que esto le dará a la compañía una gran posibilidad de crecimiento, de volver a estudiar esta obra romántica que es ‘Giselle’ y de la esencia de este ballet tan importante”, manifestó el maestro Nájera.
Para el montaje de esta obra está en la Ciudad de México el especialista Mikhail Kaniskin, director artístico de la Fundación Anton Dolin y quien trabaja con los bailarines en el estilo, “porque eso nos refiere a una época y al lenguaje de cada coreógrafo”.
Además se cuenta con el apoyo del coreógrafo checo Stanislav Fe?o y la maestra Valentina Sabina, enfocados a la pureza y la calidad artística, aspectos muy importantes en cualquier ballet romántico.
La Compañía Nacional de Danza estará acompañada por la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, que bajo la dirección de Elshad Bagirov ejecutará la música del compositor francés Adolphe Adam.
En lo que se refiere a vestuario y escenografía, Nájera aseguró que trabajarán con el que posee la propia compañía, aunque algunas cosas todavía se están revisando para que coincida perfectamente con esta versión del ballet.
El ballet “Giselle” relata la historia de una joven aldeana que decepcionada por el engaño de su amado, un noble disfrazado y comprometido con otra dama, pierde la razón y muere.
La obra de dos actos, que fue estrenada en 1940 en Nueva York, ahora será representada del 25 al 29 de abril en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, como parte de la temporada Primavera 2019 de la Compañía Nacional de Danza.
El programa iniciará justo con el estreno en México de “Giselle” en la versión de Dolin, una de cuyas funciones se presentará en el Día Internacional de la Danza, que se celebra el 29 de abril.
Otras cuatro piezas conforman el programa “Repertorio contemporáneo”: el estreno en México de “Palladio”, de Stanislav Fe?o; de “Por vos muero”, creada por Nacho Duato, además de “Ebony concerto”, de Demis Volpi, y “Casta diva”, de la bailarina y coreógrafa mexicana Yazmín Barragán.