Miles de chilenos aprovecharán las ventajas que les ofrece el tipo de cambio para viajar este verano a Argentina, donde Buenos Aires, a unas dos horas en avión, figura como el destino preferido de los turistas de este país debido a su atractivos en materia de espectáculos y cultura.
En la actualidad existen más de 190 vuelos semanales entre ciudades de Argentina y Chile, muchos de ellos ofrecidos por aerolíneas “low-cost”, lo que facilita el flujo de turistas chilenos en esta época del año hacia el vecino país.
Además, la ciudad argentina de Mendoza se ubica a sólo 360 kilómetros de Santiago, trayecto que puede cubrirse por tierra en unas cinco horas y que contempla el gran atractivo de atravesar la majestuosa Cordillera de Los Andes.
Además de Argentina, los chilenos tienen entre sus destinos internacionales preferidos Brasil, por sus playas y el tradicional “clima” de fiesta de ciudades como Río de Janeiro, y Perú, que ofrece una amplia gama de atractivos culturales y gastronómicos.
También figuran el Caribe mexicano, por sus aguas templadas, muy diferentes a la temperatura del Pacífico chileno; las ciudades estadunidenses de Miami y Orlando; Punta Cana, en República Dominicana, y San Andrés y Cartagena en Colombia.
A nivel local, miles de vacacionistas prefieren la vecina Región de Valparaíso, distante 120 kilómetros al noroeste de Santiago, para pasar unos días de descanso, playa y sol en compañía de las familias.
Un departamento para cuatro personas en la ciudad-balneario de Viña del Mar cuesta en promedio unos 100 dólares diarios, mismo valor que tiene en el vecino puerto de Valparaíso, el que sorprende por la belleza de sus cerros y los paseos en lancha por la bahía.
En la Región de Coquimbo, distante 467 kilómetros al norte de Santiago y reconocida por la limpieza de sus cielos durante la noche, las cabañas y departamentos para cuatro personas también tienen un valor promedio de 100 dólares.
Ciudades como La Serena, Coquimbo y Vicuña figuran entre las preferidas por los turistas locales porque las dos primeras ofrecen extensos kilómetros de playas en el océano Pacífico, mientras que la tercera sirve de base para conocer las viñas que producen pisco (aguardiente de uva) y los observatorios astronómicos.
Otros de los destinos preferidos por los chilenos es la zona sur, en particular las regiones de La Araucanía (679 kilómetros al sur de Santiago) y Los Lagos (mil kilómetros al sur de esta capital), donde los ríos, lagos y bosques conforman los grandes atractivos.
Este “primer turno” de los vacacionistas chilenos tendrá una extensión de tres a cuatro semanas, tras lo cual vendrá el segundo, el preferido de los habitantes de este país, durante febrero próximo.
Los empresarios del rubro turístico señalan que los chilenos prefieren tomar sus vacaciones en febrero porque el clima es mejor, con más días de calor, y porque tras los días de asueto llegan directamente a concentrarse en marzo en los retornos al trabajo y de los niños al colegio.