El fiscal del estado de Sonora, Gustavo Salas, confirmó a distintos medios de comunicación que el cantante de corridos tumbados, Natanael Cano, permanecerá en libertad, a pesar de que fue vinculado a proceso por el delito de cohecho.
Después de que el propio cantante exhibió en su cuenta de Instagram los presuntos actos de corrupción ocurridos la madrugada del viernes 29 de marzo, cuando entregó dinero a algunos policías para que no lo detuvieran por conducir a exceso de velocidad un vehículo Dodge Charger sin placas, Salas aclaró cómo se encuentra el estado legal del joven artista.
“Se llevó a cabo la audiencia inicial en contra de Natanael Rubén “N” por el delito de cohecho (…) el juez determinó vincular a proceso (…) e imponer las medidas cautelares consistentes en exhibición económica, la prohibición de salir del país sin autorización judicial y la presentación periódica a juzgado”, detalló el fiscal del estado.
Al respecto del castigo que podría recibir el intérprete de “Pacas de billetes”, Gustavo Salas subrayó a medios como Ventaneando: “Este delito puede alcanzar la imposición de una pena de prisión que va desde los seis meses a los dos años”.
Sobre lo que pedirá la fiscalía en este sentido, el representante de la ley aclaró: “Vamos a buscar que se cumpla en todos los términos y que no quede impune la conducta que fue viralizada y se hizo del conocimiento de todos ustedes a través de las redes sociales”.
De la misma manera, el fiscal de Sonora aclaró que será dentro de unas semanas cuando los policías que aparentemente fueron sobornados por Natanael, enfrenten a la justicia por sus actos.
“El próximo 10 de septiembre se va a celebrar la audiencia inicial en contra precisamente de los oficiales que también tuvieron participación de los hechos. Es en contra de los elementos de seguridad pública”, declaró.
Finalmente, Gustavo Salas señaló que será la corporación que contrató a dichos oficiales quienes tomen las medidas pertinentes contra los elementos, además de puntualizar que, si Nata sale del país azteca, solicitarán que se le imponga una medida privativa de la libertad.
Por su parte, en el programa de espectáculos indicaron que será cada dos meses cuando el joven cantante debe acudir a los juzgados a firmar, mientras se lleva a cabo este proceso, por lo que su concierto planeado para el 23 de agosto en la Ciudad de México no corre peligro de cancelación.