17 de Abril de 2023
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Tal parece que el cargo de presidente de la mesa directiva de la LX Legislatura del estado de Querétaro, es un espacio cargado de varias responsabilidades, que pueden “estresar” a quien lo ocupe.

Es el caso de la diputada del Partido Revolucionario Institucional, Graciela Juárez Montes, quien logró consensuar que se diera oportunidad a fuerzas políticas diferentes al Partido Acción Nacional para liderar las actividades legislativas.

Sin embargo, es interesante ver cómo la diputada sufrió de mucho estrés esta semana, pues se dieron distintos hechos que le han dejado en claro que el cargo no es de “enchílame otra”.

En primera instancia, se registró un corto circuito en la azotea de la sede del congreso, por el cual diputados como Antonio Zapata Guerrero ya hasta pedían una investigación y una sanción por no haberse activado la alarma contra incendios.

Sin embargo, la diputada, con una actitud evasiva, argumentó que “hasta la información que ella tiene”, no amerita un procedimiento de investigación por estos hechos. Seguramente, para evitar que en su encargo se presenten este tipo de incidencias.

En segundo lugar, la diputada tuvo esta semana un evento para la instalación de la Igualdad Laboral y No Discriminación, en el cual sufrió los estragos de la impuntualidad de otros diputados, como Ana Paola López o Andrea Tovar, miembros de la mesa directiva.

Que, por cierto, dicho evento se había agendado a las 12:00 del día; se recorrió a las 12:40 y comenzó hasta la 1:10 de la tarde. Esto molestaría a cualquiera, mucho más a Juárez Montes, que es una legisladora puntual.

Estos dos eventos hicieron que la diputada se mostrara incómoda y “estresada”. Por ello, lo interesante será ver cómo Graciela Juárez hará para demostrar que las gestiones de inclusión de otros partidos al frente del congreso darían resultados positivos, ante los obstáculos a los que se enfrenta.