Lo cierto es que las elecciones 2018 están llenas de peculiaridades históricas para todos los mexicanos y no podían rematar mejor que con la coincidencia de la plena efervescencia del mundial de Rusia.
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Durante las mismas fechas en que se juegan partidos importantes, además de los de la Selección Mexicana, estarán dándose los cierres de campaña y jugándose los famosos octavos de final.
Mucho se ha especulado si los muchachos de Juan Carlos Osorio podrían estar jugando el 1 de julio día de la jornada electoral, y la realidad es que no será así.
Así le vaya muy bien al tricolor, la posición en la que juega en el grupo F de la copa mundial, le permitiría avanzar a los octavos de final para disputar el partido el lunes 2 de julio en caso de pasar como segundo de su grupo, o el martes 3 si pasará como primero.
Sin embargo, este hecho ha dado comentarios en las redes sociales asegurando que México jugará el día de la votación, señalándolo como la clásica cortina de humo, especulando en una elección que de por sí ya lleva la desconfianza de la ciudadanía desde las pasadas elecciones de 2012, creando una incertidumbre más a las muchas que ya con lleva, cuando la realidad es que no hay forma de que pueda suceder así, y de que se trata de dos eventos completamente aislados en su proceder y actuar, pero ante todo en las organizaciones que están detrás de cada evento.
Los destinos de un país indudablemente no se pueden ligar con un evento mundialista del balón pie.Serán días de mucho corazón para los ciudadanos mexicanos, pues la copa del mundo del fútbol siempre despierta nuestro nacionalismo y esa identidad colectiva que nos hace convertirnos en uno solo para dejar el corazón y la garra, junto con nuestros seleccionados. Y es aquí donde se debe aprovechar ese sentimiento de unidad y solidaridad nacional.
México necesita a todos sus ciudadanos que gusten del fútbol apoyando a su selección, sintiendo ese orgullo hacia nuestra bandera, hacia nuestra patria, pero de la misma manera hacia el proceso electoral del 1 de julio, al ser tan complejo, requiere la participación responsable de todos, que nos permita amanecer el 2 de julio como una sociedad equilibrada y tranquila en relación al resultado de la votación sea cual sea, pero respaldado en saber que fue la elección de la mayoría.
Y la única manera en la que lo vamos a lograr, es acudiendo a las urnas y no dar nada por echo, haciendo valer nuestro derecho a elegir a nuestros gobernantes acorde a nuestros ideales, creencias y deseos de una vida mejor.
Ahí viene el MUNDIAL DE FÚTBOL RUSIA 2018, ahí viene la JORNADA ELECTORAL DEL 1 DE JULIO, y los mexicanos estaremos atentos a ambos eventos, anhelando el famoso quinto partido y decidiendo quien dirigirá el destino de nuestro país los próximos seis años. Que sea lo mejor para México y sus ciudadanos.