Querétaro, 21 de febrero de 2024.- (depositphotos) Ante una de las sequías más severas que ha enfrentado el estado, el Gobernador Mauricio Kuri González subraya la gravedad de la situación hídrica y anuncia una serie de medidas críticas para combatir sus efectos devastadores.
Reconociendo la importancia de acciones previas como la construcción del Acueducto 2 en 2003, el mandatario estatal enfatizó la necesidad de una respuesta integral que incluye desde el apoyo financiero directo hasta la reasignación de recursos para proyectos hídricos esenciales.
Con un apoyo inmediato de 60 millones de pesos destinados a aliviar las dificultades de las y los campesinos afectados por la sequía, proporcionando maíz y forraje, el gobierno de Kuri González se muestra comprometido con el sector agrícola del estado.
Además, dijo que se está trabajando estrechamente con presidentes municipales, la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), y la Comisión Estatal de Aguas (CEA) para coordinar esfuerzos que aseguren el suministro de agua, especialmente en las zonas más críticas de la sierra y semidesierto de Querétaro.
La sequía no solo amenaza la disponibilidad de agua para el consumo humano y agrícola, sino que también impacta la ejecución de proyectos de infraestructura previamente planeados.
En este sentido, el Gobernador señaló la necesidad de redirigir fondos de ciertas obras hacia la mitigación de la crisis hídrica, demostrando que la prioridad actual es garantizar el abastecimiento de agua para todos los queretanos.
La colaboración con la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) se presenta como un aspecto en este esfuerzo. La institución, con su capacidad técnica y académica, está llamada a jugar un rol significativo en la solución a largo plazo de la crisis hídrica, trabajando conjuntamente en proyectos que puedan aliviar la deuda con la CEA y, más importante aún, contribuir a la sostenibilidad hídrica del estado.
Aunque la coordinación con el gobierno federal es aún incierta, el Gobernador Kuri González deja claro que la responsabilidad recae no solo en el gobierno estatal sino también en la acción conjunta con los municipios y el apoyo de organismos nacionales como la CONAGUA, para enfrentar un desafío que es tanto inmediato como estructural.