Aunque en Mérida existen tres zoológicos, este sitio, inaugurado el 20 de septiembre de 1910, es el que más animales tiene en sus encierros, seguido por el zoológico del Bicentenario Animaya, que hasta hoy cuenta con 366 individuos de diversas especies de fauna silvestre.En el caso específico del Centenario, cuenta con 195 aves de 33 especies diferentes, unos 228 ejemplares de reptiles de 38 especies y 195 mamíferos de 35 especies diferentes, lo que la convierte en la población de fauna silvestre en cautiverio en todo el estado.
El subdirector de Servicios Generales del ayuntamiento local, Manuel Campos Ancona, comentó en entrevista para Notimex que en este lugar el visitante puede encontrar una gran diversidad de animales, entre mamíferos, aves y reptiles, entre los que destacan los leones, jirafas, cebras, peces, tigres, monos, serpientes, cocodrilos, entre otros.
Algunas de estas especies se encuentran en especial resguardo por estar en vías de extinción, toda vez que el Centenario también es considerado como una Unidad de manejo para la conservación y aprovechamiento sustentable de la vida silvestre, mejor conocida como “UMAS”.
Tan sólo el año pasado, los zoológicos del Centenario y del Bicentenario lograron la reproducción de 90 animales de 24 especies, lo que fortalece la vocación de ambos sitios como centros de conservación y aprovechamiento de la vida silvestre, recordó.En este año, en ambos zoológicos se logró la reproducción de especies que no se había dado en la última década, como el flamenco rosa y el mono tití orejas de pincel, así como venados temasate y cuatro ocelotes, entre otros, precisó Campos Ancona.
Sin embargo, uno de los logros que más ha llamado la atención a nivel local y nacional es la reproducción de cuatro cachorros de tigre blanco en el año 2015, la cual fue la primera reproducción en cautiverio de esa especie en zoológicos del sureste mexicano.Esto se logró gracias a que el Centenario, al igual que Animaya, cuenta con personal técnico conformado por un equipo de biólogos y veterinarios que brinda alimentación adecuada, vigila la temperatura y la humedad ambiental y, sobre todo, cumple con aplicar el esquema de medicina preventiva para una salud óptima de los animales en resguardo, precisó.
De igual modo, continuó, las autoridades municipales han dado continuidad a la realización de mejoras y el mantenimiento permanentes a sus hábitats que incluyen sus exhibidores y áreas de descanso.También se han invertido importantes recursos económicos y humanos en el área de “enriquecimiento ambiental” que consiste en la aplicación de estímulos que permiten disminuir en los “inquilinos” el estrés causado por el cautiverio y la exhibición.
“Todas estas acciones han permitido que Centenario sea hasta hoy el principal sitio de interés para los visitantes locales, nacionales y extranjeros que buscan conocer ejemplares de fauna silvestre y el principal centro de resguardo y reproducción en la entidad”, comentó.De hecho, el zoológico del Centenario es hasta ahora el sitio de recreo y esparcimiento familiar con una de las afluencias más altas de visitantes en la entidad, con un registro anual que ya supera por mucho las 50 mil personas.