Harare, 4 may (EFE).- Dos empresarias de Zimbabue han lanzado una plataforma digital para enseñar idiomas de África, en un momento en que la urbanización y la emigración amenazan el patrimonio lingüístico del continente.
Chido Dzinotyiwei, de 25 años, se marchó de Zimbabue a la vecina Sudáfrica con su familia cuando tenía siete años.
Creció aprendiendo inglés y zulú en su país adoptivo, pero perdió la capacidad de hablar su lengua materna, el shona, usado por la mayoría de los quince millones de habitantes de Zimbabue.
Esa pérdida se convirtió en un problema cuando su familia visitaba Zimbabue para ver a parientes y amigos.
"Cuando volvía a casa, no podía hablar con mis primos", declara a Efe Dzinotyiwei, residente en la urbe sudafricana de Ciudad del Cabo, en una entrevista en Harare.
"Eso -subraya- simplemente me frustró: el saber que estás perdiendo una parte de tu identidad y cultura".
Fue esa frustración la que impulsó a Dzinotyiwei y a su colega zimbabuense Dorcas Kwaramba a lanzar en 2021 Vambo Academy, su plataforma de idiomas africanos en línea.
LENGUAS AFRICANAS PARA RECONECTAR CON LAS RAÍCES
Vambo significa "origen" en shona y responde a la necesidad apremiante de muchas personas que viven en la diáspora de regresar a sus raíces lingüísticas y culturales, con la ayuda de la tecnología digital.
Además del shona y el ndebele, los dos idiomas más hablados en Zimbabue, la plataforma ofrece diez lenguas que se utilizan en Sudáfrica, Lesoto y Esuatini (antigua Suazilandia).
Dzinotyiwei y su equipo están desarrollando una aplicación, similar a las populares Duolingo, Memrise y Babbel, para que su servicio sea accesible a la mayor cantidad de personas.
Pero en su formato actual en línea, Vambo ofrece características únicas ausentes en otras aplicaciones, como la opción de tener clases cara a cara con un profesor en lugar de un robot.
“No es sólo algo automatizado. De hecho, puedes sentarte (virtualmente) con un (tutor) local, reservar una sesión y hablar sobre los matices del idioma o algo que quieras aprender”, explica la emprendedora.
La historia cultural es importante para Dzinotyiwei, porque aprender un idioma supone mucho más que memorizar vocabulario o saludos.
“Creo que ahora, cuando aprendo un idioma, incluso antes de comenzar a aprender los saludos y modales básicos, tengo que leer sobre la historia de las personas y entender de dónde vienen y dónde están hoy”, indica.
Las agitaciones políticas y económicas de Zimbabue desde finales de la década de 1990, cuando el país aún estaba gobernado por el difunto presidente Robert Mugabe (1980-2017), empujaron a cientos de miles de zimbabuenses a la vecina Sudáfrica y más allá.
Fueron trabajadores no cualificados desesperados por ganarse la vida en un país con una economía estable, pero también cualificados como médicos, enfermeros y maestros, que buscaban ver sus talentos reconocidos y recompensados.
Ese éxodo significa que una nueva generación de zimbabuenses ha crecido fuera de su país de origen, con pocas posibilidades de dominar el idioma del lugar de nacimiento de sus padres.
Sin embargo, Vambo Academy les ofrece la oportunidad de reconectar con sus raíces.
Dzinotyiwei precisa que, si bien el mercado principal de la academia es Sudáfrica, ella y su equipo planean agregar más idiomas de Zimbabue a la plataforma, incluidos el tonga, hablado en el norteño valle de Zambezi; y el nambya, en el remoto noroeste.
EL IDIOMA TJWAO Y SU DECENA DE HABLANTES
“Es una gran aplicación que es fácil de usar”, comenta a Efe Davy Ndlovu, activista por los derechos culturales y lingüísticos de Zimbabue.
Durante años, Ndlovu ha defendido los derechos de la minoría étnica san en Tsholotsho, en el árido oeste de Zimbabue, donde la lengua tjwao de ese grupo se está extinguiendo y sólo la hablan alrededor de una decena de personas.
Aunque él mismo no domina el tjwao, Ndlovu, de 57 años, es considerado el hablante más joven del idioma.
“Uno de los muchos desafíos de la enseñanza del tjwao es que los hablantes nativos no pueden leer ni escribir y sólo pueden enseñar usando métodos orales. Esta aplicación (solucionaría) algunos de nuestros problemas”, esgrime el activista.
Dzinotyiwei, que está terminando un máster de negocios en la Universidad de Ciudad del Cabo mientras administra Vambo Academy, sostiene que los idiomas pueden ayudar a resolver problemas sociales y económicos y a crear empresas en todo el continente.
“Sin el idioma, sin la capacidad de comunicarse con los africanos a los que estamos tratando de servir, se vuelve más difícil resolver esos problemas. Mi pasión por los idiomas -concluye- proviene de una pasión por África”.