Los presuntos atacantes se dedicaban a la venta de droga al interior del negocio en complicidad con la dueña, quien perdiera la vida en este incidente.
Según informes preliminares, la militante de dicho partido fue asesinada al llegar a su residencia, en el Boulevard Lázaro Cárdenas en la colonia Ignacio de la Llave.
Por su parte, autoridades de la FGR llevaron a cabo acciones de superivisón, para corroborar que el proceso de incineración y destrucción se realizara de manera exitosa.
La localización de fosas clandestinas se efectúo con la presencia de los colectivos de familiares de desaparecidos, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, la Comisión Estatal de Búsqueda y la Comisión Ejecutiva de Atención Integral a Víctimas.
