Tequisquiapan, 13 de mayo de 2024.- (depositphotos) La 44ª Feria Nacional del Queso y del Vino en Tequisquiapan arrancó bajo una nube de inseguridad y denuncias de corrupción por cobros excesivos en estacionamientos, mala calidad de la gastronomía y precios desorbitantes, que empañaron la experiencia de los asistentes.
Este evento, que tradicionalmente atrae a miles de visitantes, enfrentó este año múltiples desafíos que disminuyeron notablemente la calidad de la experiencia ofrecida. Los asistentes reportaron cobros de hasta 300 pesos en el pabellón de queso y vino y tarifas elevadas en los estacionamientos.
Quienes decidieron no utilizar el estacionamiento fueron víctimas de robos de accesorios y partes de sus vehículos, evidenciando una alarmante falta de vigilancia en las áreas circundantes.
Las críticas apuntan hacia las autoridades locales, que son encabezadas por Antonio Mejía Lira, acusándolas de permitir estos abusos. Se ha criticado que la policía no brindó el apoyo necesario de manera deliberada para prevenir o responder a estos incidentes, ante una posible complicidad con los dueños de los estacionamientos, para obligarlos a usar el servicio.
La feria también enfrentó desafíos en términos de promoción y afluencia de visitantes, con funcionarios municipales que han argumentado que las arcas están vacías al final del trienio, lo cual complicó la difusión.
Como resultado, la afluencia fue considerablemente menor comparada con ediciones anteriores.
Los asistentes y residentes expresaron su descontento e intranquilidad debido a estas circunstancias adversas.
Además, se denunciaron abusos por parte de los prestadores de servicios, especialmente en la venta de alimentos, con quejas sobre precios elevados y calidad inferior, que no se comparan favorablemente con otros destinos turísticos de la región.