San Juan del Río, 19 enero 2024.- En una emotiva ceremonia que marcó el final de un año de profunda espiritualidad y celebración, la Comunidad Parroquial de San Juan Bautista se congregó para clausurar el Año Jubilar en conmemoración del 75º aniversario de la Coronación de la Virgen de Guadalupe.
La Santa Misa, celebrada por el obispo de Querétaro, Monseñor Fidencio López Plaza, tuvo lugar en la Catedral, donde se llevó a cabo el rito solemne de cierre de la Puerta Santa, símbolo de la misericordia y el amor de Dios.
Los fieles llenaron el recinto sagrado, adornado con una corona de luces y la imagen de la Virgen, representada con la luna bajo sus pies y una diadema de doce estrellas, reflejando la descripción bíblica de la mujer vestida de sol.
Al inicio de la ceremonia, Monseñor López Plaza recordó a los presentes que, a lo largo del año jubilar, la comunidad ha experimentado la intercesión de la Madre de Guadalupe, sintiendo más cerca el amor y la misericordia divina.
"En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, la paz esté con ustedes", inició el obispo, invitando a la asamblea a unirse en oración y acción de gracias.
La misa fue un canto de alabanza y gratitud por los dones recibidos durante el año, y una oportunidad para renovar la fe y el compromiso cristiano de los fieles.
Al concluir la Eucaristía, Monseñor López Plaza realizó el simbólico acto de cerrar la Puerta Santa, marcando el fin del año jubilar.
Este gesto, que representa la conclusión de un período extraordinario de gracia, fue seguido por el envío de los fieles, quienes fueron llamados a ser discípulos misioneros de reconciliación y paz en sus comunidades y en el mundo.
"Con fe, con alegría y devoción, oremos la llave de David y centro de la casa de Israel que abre y nadie puede cerrar; ven y libra a los cautivos", pronunció el obispo, mientras la congregación respondía con un resonante "Amén".
La clausura del Año Jubilar es un recordatorio del llamado constante a la conversión y al servicio, inspirados por la figura de la Virgen de Guadalupe, que seguirá guiando a los sanjuanenses en su caminar espiritual más allá de este año de celebración.
A la Santísima ceremonia también acudió el alcalde Roberto Cabrera Valencia y su esposa Gina Sánchez Barrios, quienes participaron en las plegarias y ofrendas.