‘Se ahogan’ por crisis, bares, pulquerías y cantinas de Querétaro

12 de Enero de 2021
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Querétaro, 12 Enero 2021.- El presidente de la Asociación de Cantinas, Bares y Pulquerías Tradicionales de Querétaro, Juan Daniel Pérez Murillo, presentó un pliego petitorio a nombre del sector, dirigido al gobernador Francisco Domínguez Servién, el municipio de Querétaro y autoridades sanitarias, para que se dé seguimiento a la crítica situación del sector que ha dejado la pandemia por COVID-19.

Principalmente, el documento solicita la inmediata reapertura de los negocios que cuentan con el giro de cantinas, pulquerías y bares, argumentando que también ofrecen alimentos, como lo hacen los restaurantes o los restaurantes-bares.

Asimismo, Pérez Murillo señaló las deudas millonarias por más de 50 millones de pesos que han dejado más de siete meses sin actividad, por el pago de rentas, servicios, sueldos, pago de impuestos, entre otros; afectando los ingresos de los empresarios y trabajadores.

Además, sostuvieron que durante el tiempo que se les permitió abrir, del 28 de septiembre al 19 de diciembre, no se dio clausura o suspensión de algún negocio del giro por el incumplimiento de medidas sanitarias.

Pérez Murillo comentó que se pedirá a las autoridades la condonación del pago de renovaciones de licencias de alcoholes y funcionamiento; y apoyos económicos para los empresarios afectados.

En caso de que no se les permita aperturar de esta manera, se da como opción que puedan operar por un tiempo determinado como restaurante-bar, sin costo alguno en el cambio de giro; aunque indicó que esto significaría “acabar con las cantinas, pulquerías y bares consideradas una tradición en el estado”.

“No hay piso parejo. Queremos ya trabajar, queremos reabrir, y queremos hacerlo como siempre lo hemos hecho, de la mejor manera. De no haber respuesta, ya estamos quebrados y cerraríamos perdiendo la batalla. No podemos volver a reabrir. Perderíamos más de 2 mil empleos directos y 8 mil de forma indirecta”, manifestó.

Pérez Murillo refirió que el cierre de estos establecimientos fomenta la economía ilegal, con la venta no permitida de alcohol en otros establecimientos y fuera de horarios, incluso a través de redes sociales.