Este proyecto no utiliza agua por medio de tuberías, sino que degrada la materia fecal por medio de compostación, pues las heces se almacenan en un recipiente, en el cual se les agrega aserrín, tierra, ceniza, hojas secas y en un tiempo estimado de un año todo esto se transforma en tierra abonada que puede ser usada para la recuperación de suelos.
El sistema lo construyeron en las instalaciones de esta unidad académica, Campus Aeropuerto de dicha Universidad.La directora de la Facultad de Filosofía, Margarita Espinosa Blas, expresó su reconocimiento a los jóvenes que participaron, así como a la plantilla docente que se involucró en este proyecto.
Juan Antonio Ruiz Callejo, coordinador administrativo de la Dirección de Vinculación de la UAQ, en representación de la rectora Teresa García Gasca, felicitó a los estudiantes por esta propuesta.
“Es trascendental proponer esta clase de iniciativas, que sean algo nuevo, que dé soluciones y nos ayuden a mejorar”, sostuvo Ruiz Callejo, a través de un comunicado de la UAQ.Asimismo, la profesora responsable del proyecto, Itziar Urquiola Guerrero, aseguró que este tipo de trabajo de los estudiantes son una muestra de que los universitarios pueden proponer.