Alertó sobre la perdida de agua en los acuíferos queretanos, que en los últimos años se ha abatido de manera alarmante y que de no tomar acciones inmediatas, se podría generar una grave problemática de desabasto para los próximos años.
Recordó que la precipitación pluvial en el estado actualmente es de 600 mil milímetros cúbicos al año, mientras que la media anteriormente era de más 800 mil milímetros cúbicos lo que sin duda debe de ser un llamado de atención.
“Tendría que pasar mucho tiempo para que el acuífero se pueda recuperar de manera paulatina, cosa que no sucede por dos razones fundamentales, en el estado de Querétaro hemos experimentado fuertes sequías, que han hecho que la precipitación pluvial sea mucho menor y la explotación del acuífero es cada vez mayor”.
Para poder revertir esta situación, dijo que se debe de limitar el uso de agua y los gobiernos deben de tomar acciones específicas para poder recuperar el vital líquido, ya que la problemática se agudiza por la escasez de lluvia, que se trata de un factor que no se puede controlar.
“Mientras no revertamos esta tendencia que está en nuestra posibilidad, que el uso racional del agua, un uso adecuado del agua, extraer menor recurso de lo que hoy estamos extrayendo, porque con la precipitación pluvial no tenemos mayor influencia”.
Apuntó que de no tomar medidas inmediatas entonces no se podrá mejorar las condiciones de los acuíferos y esto pone en peligro la distribución del vital líquido.