Ginebra, 28 sep (EFE).- Al menos 21 empleados de la Organización Mundial de la Salud (OMS) son sospechosos de haber cometido abusos sexuales contra mujeres y niñas durante la respuesta al brote de ébola sufrido por la República Democrática del Congo entre 2018 y 2020, concluyó hoy una comisión investigadora interna.
Esa comisión determinó tras doce meses de pesquisas que a algunas de las víctimas se les prometieron empleos a cambio de relaciones sexuales y también recibió denuncias de nueve posibles violaciones, así como extorsiones a mujeres que fueron obligadas a abortar tras sufrir estos abusos.
Tras conocerse los resultados preliminares de la investigación, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió perdón a las víctimas, se declaró responsable de los "fallos en el sistema" que ha mostrado este caso y prometió reformas en la OMS para evitar que estos sucesos no se repitan en el futuro.