Tokio, Japón, 19 Ene 2024.- (depositphotos) El módulo japonés SLIM "aparentemente se posó" en la Luna a primeras horas del sábado (hora nipona), anunció la agencia espacial del archipiélago (JAXA), que intentaba no obstante verificar el estado de la sonda.
El módulo SLIM (Smart Lander for Investigating Moon), que orbitaba el satélite terrestre desde finales de diciembre, inició su descenso sobre medianoche (15H00 GMT) a una velocidad de unos 1.700 metros por segundo, posándose unos veinte minutos después.
"En las pantallas vemos que SLIM se posó en la Luna. Estamos verificándolo", indicó Shin Toriumi, un funcionario de JAXA, en una comunicación en directo.
Con esta misión, Japón busca ser la quinta nación en lograr un alunizaje exitoso después de Estados Unidos, la Unión Soviética, China e India.
El módulo de alunizaje japonés, con una sonda rodante desarrollada por una empresa de juguetes, fue además diseñado para hacerlo con una precisión sin precedentes, lo que le valió el apodo de "Moon Sniper" ("francotirador lunar", en español).
Si todo fue según lo previsto, habrá alunizado en un radio de cien metros respecto al punto de referencia fijado en la superficie del satélite, un margen mucho más estrecho que el de las zonas de aterrizaje habituales, de varios kilómetros.
Un éxito revertiría la mala racha del sector aeroespacial japonés, que acumula dos misiones lunares y varios lanzamientos de cohetes fallidos.
Como hizo India por primera vez en agosto con su programa espacial de bajo coste, la misión japonesa tiene como objetivo el polo sur de la Luna, muy poco explorado.
Un alunizaje seguro del "Moon Sniper" sería "algo muy importante", dijo Emily Brunsden, profesora de astrofísica y directora del Astrocampus de la Universidad de York.
"La precisión de 'francotirador' del alunizaje es un enorme salto tecnológico que permitirá diseñar misiones para abordar cuestiones de investigación mucho más específicas", explicó a la AFP.
"Normalmente solo hay una oportunidad de hacerlo bien, con lo que el mínimo error puede provocar el fracaso", añadió.
El origen de la Luna
La agencia nipona JAXA ya consiguió un aterrizaje de precisión sobre un asteroide, pero el reto es mayor en la Luna porque la gravedad es más intensa.
El módulo de aterrizaje intentará colocarse en un cráter, desde donde creen que podrán acceder al manto de la Luna, la capa que hay bajo su corteza.
"Las rocas expuestas aquí son cruciales en la investigación sobre el origen de la Luna y la Tierra", explicó a la AFP Tomokatsu Morota, profesor de la Universidad de Tokio especializado en exploración lunar y planetaria.
La misión también quiere aportar luz al misterio sobre la posible presencia de agua en el satélite, un factor clave para la eventual construcción de bases lunares.
"La posibilidad de la comercialización lunar depende de si hay agua en los polos", indicó Morota.
La sonda esférica y metálica de la misión, con un tamaño algo mayor al de una pelota de tenis y equipada con una cámara, fue desarrollada por JAXA junto a la empresa juguetera Takara Tomy.
Más de 50 años después de que el ser humano llegara a la Luna, muchos países y empresas privadas intentan imitar la gesta.
Pero muchas misiones terminan con naves estrelladas en el satélite, fallos de comunicación u otros problemas técnicos.
Este mes, un módulo de alunizaje privado estadounidense tuvo que regresar a la Tierra por una fuga de combustible y la NASA pospuso los planes para enviar misiones tripuladas a la Luna de su programa Artemis.
Rusia, China, Corea del Sur o Emiratos Árabes Unidos, entre otros, también intentan alcanzar el satélite terrestre.
Japón cuenta con dos misiones fallidas en su historial, una pública y otra privada.
En 2022, el país insular envió sin éxito la sonda lunar Omotenashi como parte de la misión estadounidense Artemis 1.
En abril, la empresa emergente ispace intentó convertirse en la primera firma privada en llegar a la Luna, pero perdió la comunicación con su nave después de un "aterrizaje duro".