Huimilpan, 22 de noviembre de 2024. Ante un grave caso de maltrato animal, la comunidad de San Pedro Guimilpan denunció el abuso sexual y las lesiones físicas sufridas por un perro conocido como “Copito”.
El canino, que era cuidado y querido por los vecinos, fue encontrado con signos de violencia extrema, incluyendo un abuso sexual y daños internos provocados presuntamente por un objeto punzocortante.
Este caso ha generado indignación en los habitantes de la localidad, quienes exigen justicia y un mayor compromiso por parte de las autoridades municipales para prevenir y sancionar estos actos de crueldad.
“Copito” era un perro comunitario, conocido por los niños del preescolar local, que había sido esterilizado y estaba bien alimentado. Sin embargo, durante el fin de semana, fue encontrado gravemente herido, lo que motivó a los vecinos a denunciar el hecho ante las autoridades", dijo una de las mujeres que denuncian.
Destacó que a pesar de las pruebas de maltrato, las denuncias iniciales fueron ignoradas debido a que “Copito” era un perro callejero, lo que dificultó que el caso fuera tomado con la urgencia requerida.
El maltrato animal no es un hecho aislado en la región, ya que, según los testimonios de los residentes, se ha registrado un aumento en los casos de abuso hacia los animales en varias comunidades, especialmente en Huimilpan.
Se han reportado perros con heridas causadas por cuchillos y otros objetos, lo que hace temer que estos incidentes puedan escalar y convertirse en un problema de mayor magnitud si no se toman medidas inmediatas.
Ante la presión de la comunidad y los activistas, el gobierno municipal de Huimilpan emitió un comunicado en el que aseguró que se abrió una carpeta de investigación (folio CI/AME/1207/2024) y que se están realizando las indagatorias correspondientes.
Además, informaron que están trabajando en la creación de una “Unidad de Protección Animal” para atender estos casos y garantizar el bienestar de los animales en el municipio.
A pesar de este compromiso, persiste la preocupación de que la falta de una estructura específica para la protección animal en el municipio dificulte el seguimiento de estos casos y la prevención de futuros abusos.
El llamado de la comunidad exige justicia para “Copito” y para todos los animales víctimas de maltrato en la región. Activistas y ciudadanos coinciden en que es urgente una respuesta más firme de las autoridades para garantizar que estos actos no queden impunes y que se establezcan políticas claras de protección animal.