Mediante una denuncia pública, el Consejo Indígena de Gobierno Autónomo en esta comunidad aseguró que elementos de la Guardia Nacional, Policía Estatal y Policía Municipal detuvieron y desaparecieron a Venancio Ramírez López quien formaba parte de las guardias comunitarias junto con su madre.
Dicha desaparición, de acuerdo con los testimonios, ocurrió aproximadamente a las 20:00 horas del miércoles 1 de septiembre, cuando los elementos de la Guardia Nacional ingresaron a su domicilio para sustraerlo e incomunicarlo, por lo que hasta el momento se desconoce su paradero.
Eso ocurrió tras el fracaso de un nuevo intento de las autoridades por recuperar la pipa de agua que se mantiene detenida por los pobladores en el pozo del Barrio IV, la cual no contaba con autorización del Consejo Indígena para disponer del líquido que ha escaseado en el pueblo.
Entre abril y mayo de este año, los pobladores denunciaron ante la Comisión Estatal de Aguas (CEA) que una empresa privada de pipas buscaba sustraer ilegalmente el líquido durante las épocas de sequía, no obstante, la propia CEA reconoció haber contratado a las pipas para abastecer a otras partes del municipio.
Ante este conflicto, los pobladores solicitaron formalmente la propiedad del pozo a la CEA, sin embargo la dependencia no ha resuelto dicha solicitud bajo el argumento de que la comunidad no cuenta con los recursos para darle mantenimiento y uso adecuado.
Entre tanto, elementos de seguridad pública han intentado en varias ocasiones liberar la pipa y asegurar el poso, lo que ha obligado a los pobladores a intervenir bajo el temor de que no les permitan ocupar el líquido, el cual no se han negado a pagar.
El Consejo de Gobierno Autónomo exigió a aparición con vida de Venancio Ramírez López, además de que hizo responsables a las distintas corporaciones de seguridad (federal, estatal y municipal) de la integridad del joven.