Mientras este documental de Julio Fernández Talamantes continúa su recorrido por diversos festivales de cine como el de San Cristóbal de las Casas que se realiza del 8 al 11 de diciembre.
En declaraciones a la prensa, el director compartió su experiencia en la realización de esta cinta que se centra en la vida de tres jóvenes que se encuentran en un centro penitenciario cumpliendo su condena por diversas delitos cometidos.
Sin embargo, a estos tres presos los une una pasión en común, la música, y es desde este punto que Fernández narra la historias, sin juzgar.
"No es una apología del crimen lo que hice, ni mucho menos pretendo ser un juez, creo que ellos ya han sido juzgados, pero mi intensión era mostrar qué los lleva a infringir la ley y las repercusiones que tienen en su vida y la de los suyos", apuntó.
"Las historias son ricas y bueno llegaron a mi estos tres jóvenes por azares del destino, tenía otro historia en mente que no se logró y los conocí y aceptaron", explicó.
"Así fue como empezó y con el tiempo logramos hacer una relación más estrecha, lo que también permitió que entraramos en su vida y el ambiente en el que se desarrollan", apuntó.
El cineasta reconoció que este trabajo le dejó una gran lección de vida, "son historias fuertes, pero que también te muestran al ser humano", explicó el realizador.
"Estoy satisfecho con los resultados de este trabajo, que seguirá en festivales en otros puntos del mundo", dijo el cineasta, quien ahora prepara un nuevo trabajo fílmico.