Recordó que se trata de un camino de 2 vías que cruza por encima de la presa, que es utilizado por automóviles, transporte urbano, peatones y ciclistas.
El tema se ha convertido en una prioridad no solamente por la gran cantidad de percances que se presentan sobre la arteria, sino porque el crecimiento poblacional se ha incrementado en los últimos años para las comunidades de La Llave y La Valla.
Recordó que tienen otro acceso por la zona de Tequisquiapan; sin embargo, la mayoría de las actividades económicas, comerciales y sociales que realizan los habitantes es hacia San Juan del Río.
“El camino de acceso a La Llave, con dirección a San Pedro Ahuacatlán, es una vialidad de apenas 2 vías que carece de área peatonal o para la circulación de bicicletas. La necesidad es ampliar o crear una nueva vialidad porque nuestra población sigue creciendo”.
Estimó que en promedio hay 17 mil habitantes en La Llave, mientras que en la Valla son poco más de 15 mil personas, l referir que en las mañanas ya se presenta intensa carga vehicular.
“En promedio al mes se presentan 2 accidentes sobre la vialidad que cruza por encima de la presa, ya sea salidas de camino, choques frontales o atropellamientos”.
María del Rosario Ríos Rodríguez, destacó que otra de las necesidades que enfrenta La Llave es la urbanización de calles, regularización de nuevas colonias e instalación de alumbrado público.
Al hablar sobre la seguridad reconoció que esta administración se preocupó en generar un esquema que permite mayor presencia de patrullas, además que se logró la colaboración con la Secretaría de Seguridad Ciudadana y la Policía Federal, para erradicar el robo al tren que tanto afectaba a los habitantes.