Ingresada en la corte del distrito sur de Nueva York a nombre de varios accionistas que se dicen afectados, la demanda argumenta que Televisa usó a la filial suiza Mountrigi Management Group para “llevar a cabo y ocultar su plan de soborno a los ejecutivos de la FIFA”.
El plan era obtener ilegalmente los derechos de transmisión de los torneos de la Copa Mundial de la FIFA 2018, 2022, 2026 y 2030, además de que para encubrir sus actos la empresa “alteró sus registros contables durante años”, de acuerdo con el documento ingresado la noche del martes.
Los presuntos actos de corrupción salieron a la luz una vez que los auditores descubrieron el esquema a finales de 2017 cuando se difundieron testimonios a la luz del escándalo internacional de sobornos en torno a la FIFA, lo que ha generado condenas criminales a más de 20 individuos.
El documento señala directamente a Emilio Azcárraga Jean, director ejecutivo de la empresa de medios, y a Savi Folch, director de finanzas, de que “sabían o ignoraban imprudentemente que millones de dólares fueron desviados” a través de debilidades en los controles internos.
Añaden que para llevar a cabo el esquema de soborno, Televisa conspiró con el argentino Alejandro Burzaco, director general de la empresa Torneos y Competencias. La demanda argumenta que Burzaco “tenía años de experiencia en el pago de sobornos a los ejecutivos de la FIFA”.
Los alegatos representan el último capítulo en la investigación criminal en curso en Nueva York, incluyendo la declaración de culpabilidad del propio Burzaco, quien acordó cooperar con la investigación.
Asimismo, el papel de la filial Mountrigi en el supuesto esquema de sobornos fue revelado en un artículo publicado en octubre del 2017 en el diario "The New York Times". Pocas horas después de la publicación del texto tanto Azcárraga Jean como Salvi Folch renunciaron a sus puestos.
De acuerdo con la demanda, “los inversionistas han perdido cientos de millones de dólares desde que se reveló que Televisa obtuvo sus codiciados derechos de medios de la Copa del Mundo a través de sobornos en lugar de a través del juego limpio”.
Por ello, los quejosos, así como todas las personas o entidades que adquirieron acciones de Televisa del 11 de abril de 2013 al 25 de enero pasado, buscan la reparación por las pérdidas causadas por las supuestas violaciones de los acusados a las leyes del mercado de valores de Estados Unidos.
Una de las evidencias del soborno, de acuerdo con la demanda, es que Televisa anunció en julio pasado haber cancelado su contrato con su auditor, la firma PricewaterhouseCoopers, que según el documento de la corte “no estaba dispuesta a ignorar las prácticas contables” de Televisa.
Televisa expresó en una declaración publicada por el sitio de noticias BuzzFeed que los argumentos de la demanda “no tienen fundamentos legales”. Afirmó que una investigación de abogados independientes determinó que la empresa no incurrió en prácticas corruptas.
La compañía agregó que “todos los pagos hechos por Televisa son legítimamente necesarios para la búsqueda de contratos y de ninguna manera se realizaron como pagos relacionados con ningún tipo de conducta incorrecta”.