De acuerdo con datos de Bajo Tierra Museo del Agua, y su informe “Sobreexplotación del agua en la zona metropolitana de Querétaro”, entre el 2011 y el 2021, se perforaron 135 nuevos pozos para uso agrícola, industrial, incluso en zonas de veda.
La iluminación es una de las razones por la que los habitantes dejaron de acudir al lugar, ya que después del atardecer, el parque se vuelve oscuro en la mayor parte de su perimetro.