La dependencia estatal precisó que los alimentos que consuman los infantes y adolescentes deben proveerles de nutrimentos y energía para realizar sus actividades escolares.
Además, "se deben evitar grandes lapsos de ayuno para que no sufran alguna descompensación, precisó la líder Estatal del Programa de Alimentación de la Sesa, Claudia Torres Soria".
Explicó que los refrigerios deben contener alimentos ricos en proteínas, vitaminas y minerales, que se pueden encontrar en productos de origen animal y vegetal.
También destacó la importancia de lavar y desinfectar perfectamente frutas y verduras, y tener una adecuada higiene en la preparación del almuerzo para evitar que los menores ingieran patógenos nocivos para su salud.
Torres Soria también recomendó integrar a la dieta de este sector de la población ensaladas de verduras, frutas de temporada, galletas integrales, semillas, cítricos, pastas y lácteos, entre otros alimentos con alta calidad nutricional.