Durante el diálogo “Sabor a ti”, en el marco del Foro Vidanta que se desarrolla en este destino turístico, Rodrigo Braun, director de Relaciones Públicas de José Cuervo, señaló que si bien esta marca ha sido sinónimo de México y tequila a nivel internacional, aún hay mucho por trabajar en torno a la cultura de la bebida en el país.
“Sobre todo en la parte de la experiencia, nosotros buscamos que los visitantes a las destilerías vivan algo único y memorable; en la industria del tequila no sólo se trata de producir, sino de crear emociones”, explicó.
Agregó que los turistas que llegan al municipio de Tequila, Jalisco, tienen la oportunidad de disfrutar el paisaje agavero, Patrimonio de la Humanidad, hacer recorridos por las destilerías y degustar la bebida. Una actividad integral que lo hará volver o invitar a otras personas a que visiten el lugar.
“Sin embargo, aún puede hacerse más puesto que el tequila tuvo su boom mundial hace no mucho tiempo, por eso considero que aún hay mucho camino por recorrer. Necesitamos instituciones facilitadoras de promoción y de exponenciación de la gastronomía mexicana”, sostuvo.
Por su parte, Hugo D’Acosta, enólogo del Valle de Guadalupe, en Ensenada, Baja California, expresó que el vino apenas empieza a ser una propuesta, pero en los próximos años será una gran tendencia si se conduce de manera adecuada.
“No es que vayamos a tener las grandes producciones de Francia, Argentina, Chile o España, nuestra condición geográfica es más limitada, lo que sí podemos lograr es que el vino de México sepa a México, ese es el reto”, apuntó.
D’Acosta opinó que el mexicano debe aprender a ofrecer lo que tiene para ser auténtico y no distorsionar su tierra de origen para adaptarla a lo que el turista quiere. “No debemos tener miedo a mostrar lo que es en realidad México, hay que dejar de lado el prejuicio para mostrar el esplendor de su variedad”, acotó.