¿Llega la teoría de género a las aulas universitarias?

19 de Marzo de 2018
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La Habana, 19 marzo (SEMlac).- De manera intermitente o sistemática, como asignatura específica o enfoque transversal, la teoría de género acumula experiencias en las universidades cubanas.

Especialistas e investigaciones resaltan la última década como un período importante en el trabajo de los claustros universitarios para avanzar en el reconocimiento de la teoría feminista como campo de saber.

Las carreras de Sociología, Psicología y formación pedagógica llevan la avanzada, con asignaturas y contenidos dentro de la formación básica. En años más recientes, otras carreras como Derecho, Historia, Periodismo y Comunicación Social, Historia del Arte y Filología han incluido optativas sobre Género.

Pero existen diferencias no solo entre las carreras, también los centros de altos estudios muestran recorridos propios. Profesoras universitarias entrevistadas por SEMlac identificaron avances, retos y estrategias diversas.



"En el caso de la Universidad de Oriente, tenemos incorporada la teoría de género en los contenidos, la bibliografía y también la formación del profesorado en las carreras de Psicología y Sociología", dijo a SEMlac Rosa María Reyes Bravo, vicerrectora para la Investigación y Posgrado de ese centro, ubicado a 860 kilómetros de la capital.




Sensibilizar e impactar en la ideología de género es un primer paso que buscan profesoras y especialistas. Conceptos como género, patriarcado, feminismo, equidad, violencia de género y sexismo integran el programa académico.

Para Damaris Hernández Marí, profesora de Género y Comunicación de la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz, en la carrera de Periodismo, "es importante enseñar a desmontar estereotipos y erradicar el lenguaje sexista que, por cotidianos, a veces pasan inadvertidos".

Hernández Marí prioriza la formación seria y sistemática, pues "los temas de género no deben ser tratados desde la inexperiencia o el voluntarismo, pues lejos de promover una cultura de equidad y de paz, pueden reafirmar actitudes machistas y discriminatorias".

Los antecedentes de estas experiencias se remontan a la década de los noventa del siglo pasado. En ese recorrido marcaron pauta la creación en centros universitarios del país de las Cátedras de Género y Cátedras de la Mujer y la Familia, indistintamente, durante la segunda mitad de los años noventa.

Pero fue en 1994 cuando, por primera vez, se impartió la asignatura Género y Sociología en la Universidad de La Habana; para 1998 se incluyó como obligatoria para estudiantes de Sociología.

Parte de esa historia aparece en el texto "Algunas reflexiones sobre la transversalización del enfoque de género en la Educación superior, la experiencia de la carrera de Sociología en la Universidad de La Habana", de las académicas Magela Romero Almodóvar, Clotilde Proveyer Cervantes y Reina Fleitas Ruiz.

El artículo se incluye en la antología Género y Sociedad. Encrucijadas teóricas y alternativas para el cambio, presentada el pasado 8 de marzo en la capital.

La selección de lecturas reúne textos clásicos del feminismo y estudios nacionales, con el objetivo de contribuir a la formación académica y la investigación.

Preparación del claustro, participación en espacios de decisión, resultados de trabajo y cabildeo son estrategias vitales para quienes aspiran a integrar los aportes teóricos y políticos del feminismo a la formación universitaria.



"Creo que todavía nos falta mucho. Para introducir la perspectiva de género, el profesorado tiene que estar preparado y no con un curso de una semana de sensibilización. La falta de profesionales preparados y también la subvaloración del tema nos afecta", reflexiona la psicóloga e investigadora Aida Torralbas Fernández.




Frente al debate de transversalizar o trabajar este campo del conocimiento como una asignatura específica, la profesora de la Universidad de Holguín, en el oriente del país, opta por ambas posibilidades.

"Debe ser una asignatura específica en los primeros años y, a partir de ahí, lograr una transversalización. Pero mientras las comisiones nacionales de carrera no desarrollen la transversalización de la teoría de género, será muy difícil su inclusión", opina Torralbas Fernández.

Otra aspiración es llegar a carreras de las ciencias naturales y técnicas, ampliar los debates y visibilizar los aportes de la economía feminista y el ecofeminismo.

"Creo que hay que trabajarlo atendiendo las peculiaridades de los claustros, de los currículos y, sobre todo, atendiendo las problemáticas que se dan en el entorno sociolaboral de esas profesiones", concluye Reyes Bravo, de la Universidad de Oriente.