Bajo la dirección artística de Mario Galizzi, la agrupación recordó el 199 natalicio de quien es considerado el Padre de la Danza Clásica, con tres obras que se ganaron los multitudinarios aplausos de una sala que registro buena entrada en la primera de cuatro funciones.
En un adelanto de lo que vendrá en 2018, cuando se cumpla el bicentenario del maestro de ballet, cerca de 40 bailarines ofrecieron un gran espectáculo, donde presumieron sus mejores pasos coreográficos.
Giros, carcajadas, solos, duetos, constantes parados de puntas y una buena condición física, atraparon las miradas de chicos y grandes en una velada "magica", llena de mucho baile y elegantes vestuarios.
De acuerdo con Galizzi, la obras que se presentaron fueron elegidas "porque Petipa explora tres estilos distintos, pues se inspira en los bailes folclóricos de la región en la que retomó las historias.
“´La bayadera´ está inspirada en una leyenda de la India, ´Don Quijote´ en la Barcelona del siglo XVIII y ´Raymonda´ en la época de las cruzadas. Petipa fue realmente un gran viajero y retomó los bailes de todo el mundo para sus coreografías".
Considerada como una de las obras fundamentales del repertorio de las compañías de danza clásica, con “La Bayadera” inició el homenaje a Petipa, donde más de 20 bailarinas lucieron, además de sus grandes pasos y parados de puntas, sus hermosos tutus, despertando las miradas entre los presentes ante la historia de amor eterno, misterio, destino, venganza y justicia.
Este ballet hace referencia al drama de una bailarina de un templo (bayadera), "Nikiya", quien es amada por "Solor", un guerrero noble. Ella es también amada por el Alto Brahmin, pero no le corresponde, como al primer.
La gala continuó con “Raymonda”, considerado como uno de los “grands ballets” por antonomasia del repertorio de Petipa, tanto en duración cómo en espectáculo. Aparecen los rasgos habituales de los ballets de la época: un gran castillo, una elegante dama, un valiente caballero, ensoñaciones entre las flores y exóticos visitantes extranjeros.
La historia que se centra en una mujer pretendida y amada por dos hombres de distintas instancias sociales, destacó por su vestuario, así como por la presencia de los bailarines varones de la compañía, que al igual que las damas despertaron los aplausos.
La gala cerró con “Don Quijote”, obra cuyo argumento, extraído del segundo volumen de la novela de Miguel de Cervantes Saavedra, se encuentra principalmente centrada en los amores "Kitri" y el barbero "Basilio", el caballero de la triste figura y "Sancho Panza", cuyos personajes míticos atraviesan una serie de aventuras en torno a la joven pareja.En esta coreografía, ambientada muy al estilo de la época de los caballeros y las cruzadas, los solos y los duetos conquistaron a un público que quedó atrapado por los hermosos vestuarios.
La propuesta de la CND se volverá a presentar los días 15, 17 y 20 de agosto en el Palacio de Bellas Artes.