Campeche, sociedad cuya identidad se fortaleció contra viento y marea

28 de Junio de 2015
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Campeche, 28 Jun 15 (Notimex).- Atuendos, oficios, historia y la fusión de una cultura maya con la española hacen de las tradiciones y costumbres de los campechanos un Patrimonio de la Humanidad y un lugar atractivo para el turismo mundial.

Un pescador, una ventera del mercado, el tejedor de henequén, personajes todos de un Campeche histórico y contemporáneo, vasijas, armas, vestimentas que transportan al visitante a la época de gran auge en este que fuera el principal puerto del sureste que conectaba a México con España.

Los pasajes de la historia viven en el museo de El Palacio que esta estratégicamente proyectado para mostrar la historia de Campeche y el valor de su gente.

El Palacio, Centro Cultural, de acuerdo a la responsable de comunicación social de la Secretaría de Cultura de Campeche, Aurora del Sol Castillo Peralta, es parte de un proyecto integral llamado Campeche Ciudad Museo.

Èste, dijo, tiene como objetivo ubicar a la ciudad a la vanguardia en materia educativa, cultural y turística, para que los visitantes puedan estar en contacto directo con sus calles, arquitectura, urbanismo, su gente, museos, etcétera.

El Centro Cultural se ubica en una esquina del primer cuadro del zócalo capitalino, donde fueron reconstruidos los edificios de la Aduana y El Principal para dar paso a este centro de grandes salas y contenidos de gran interés.

El museo fue planeado en salas llamadas Fortificaciones, Comercio y Navegación, con un equipo multimedia denominada “Celebremos Campeche”, la cual permite en cada una apreciar proyecciones y pantallas interactivas, así como un simulador de un barco que navega desde Campeche hasta España.

La sala de Fortificaciones transporta al visitante a los sistemas de defensa y el por qué de la necesidad de proteger este puerto del saqueo de ataques piratas.

Pero al mismo tiempo destaca las condiciones que motivaron a la UNESCO a integrar a Campeche a la lista de Patrimonio de la Humanidad.

Ello se puede ver un mapa de grandes dimensiones donde se pueden apreciar las fortificaciones del Caribe acompañada de la representación de atacantes y defensores, obra de la artista plástica Rocío Caballero, con información y asesoría de la doctora Adriana Rocher.

Pero si de recursos tecnológicos hablamos, se trabajó en un “video mapping” sobre una maqueta a escala y dos pantallas frontales con la asesoría del cronista de la ciudad, Juan Manuel Alcocer Bernés, así como el arquitecto Sergio Palacios y la doctora Adriana Rocher, que brindaron información para ser procesada por el dramaturgo Flavio González-Melo en guiones literarios.

En este espacio, dijo Castillo Peralta, también se pueden apreciar videos y objetos sorbe temas como los fuertes, baluartes y trincheras, así como conventos y los ataques piratas y del ejército inglés, por lo que se ve la evolución de la fortificación de la villa, sus costos, tiempo de realización.

Pero también los momentos históricos que determinaron el actuar y tradiciones de los campechanos.

En la sala de Comercio se conoce de cerca las bases de la economía de Campeche a través de su historia, riquezas regionales y su uso, como el famoso palo de tinte, la sal, cera, algodón, maderas y otros productos de exportación como fibras vegetales.

Aquí existe también un espacio interactivo, donde el visitante elige una ruta y los productos que transportará de América a Europa y durante la travesía se enfrentan a amenazas propias del comercio marítimo.

Una de las salas más atractivas es la de Navegación, un mundo de la tripulación de los barcos, la cual contó con la asesoría de la arqueóloga sub-acuática Doctora Helena Barba, una especialista que plasma información de las rutas de viaje, las embarcaciones que se usaban en la época, su construcción y la vida cotidiana de quienes pasaban meses en el navío.

Por ello se dividieron los temas en la construcción naval, ya que Campeche fue uno de los grandes astilleros de América, con diversos modelos navales, algunos originales y otros que son réplicas de partes a tamaño natural, instrumentos de navegación y dioramas, además de apoyos gráficos que resultan hacer entendibles los temas a los turistas.

El espacio de inmersión sobre navegación es una sala donde mediante un simulador en forma de barco el turista emprende un viaje posado en la cubierta de una embarcación.

Durante ocho minutos experimentan ciertos aspectos de un viaje por el océano, con carga de mercancías valiosas que eran objeto de los ataques piratas, pero que además debían sortear los embates de la naturaleza.

El viaje trasatlántico pasa por días y noches de tormentas, de luchas aguerridas con corsarios, pero también de algunas tranquilas que se aprecian las estrellas y la calma del mar en una embarcación cuya madera ruge al ritmo del oleaje que se siente a la perfección mediante un mecanismo hidráulico.

El museo tiene en sus salas estatuillas que simulan los hombres y mujeres de Campeche en sus actividades cotidianas, vasijas, máscaras, utensilios, muebles, objetos personales, vestidos de gala, de fiesta y de diario, armas y en los pasillos con escaleras dos murales que dejan ver la vida y movimiento comercial de Campeche.

Y en el vestíbulo trajes típicos y vestimentas de los campechanos contemporáneos, asi como joyas y accesorios que complementan su vestimenta son exhibidos a tamaño natural que muestran parte de las tradiciones en el vestir de este estado del sureste mexicano.

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