Interpreta la OFCM "La consagración de la primavera", de Stravinski

20 de Mayo de 2013
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México, 20 May. (Notimex).- La Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) --dirección de José Areán-- interpretó, el pasado fin de semana --Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli (CCOY)--, "La consagración de la primavera", de Igor Stravinski (1882-1971), en tributo por el centenario de su estreno en París.

Función que se complementó con "Obertura Festiva", Dmitri Shostakovich (1906 - 1975), y "Juegos", de Claude Debussy (1862-1918).

Comenzó la gala con el músico a quien el régimen estalinista acusó de ser "enemigo del pueblo" por su música "burguesa, elitista y sin emotividad proletaria". Ciertamente, "Obertura festiva", compuesta en 1954 para celebrar el 37 aniversario de la Revolución Bolchevique, reviste algunos parámetros muy propios de realismo socialista.

Hay, indiscutiblemente, cierto tono irónico que Shostakovich supo sortear muy bien en su partitura. Trompetas iniciales en fanfarria socarrona y suerte de marcha en redoble percutivo. Sección de madera y metales en sinuosa irisación y cuerdas edificando un sardónico motivo melódico en atenuante tiempo de vals.

La OFCM supo transmitir con acierto toda la grandiosidad cromática, y sumarios sonoros ("efectos amanerados y burgueses", dirían los funcionarios comunistas) de trombones, trompetas y cornos en un orfeón lúdico que molestó seguramente, a las autoridades culturales soviéticas.

Dio continuación el programa con "Juegos", que la OFCM deletreó en animada ejecución de atmósfera impresionista: contrastes y serpenteos. Espirales cromáticas de las cuerdas que desembocaban en silencios. Arpas delineando cadencias acuosas.

Flautas, oboes, corno inglés, trompetas, trombones, clarinete bajo, fagotes, tuba, timbales, platillos, triángulo, celesta, arpas, clarinetes, cornos, platillos, pandero, contrafagot y cuerdas --bajo rigurosa conducción de Areán-- que supieron elucidar las sucesiones de escindas irrepetibles de una pieza que Debussy compuso para un ballet en 1913.

Intermedio. Llamó la atención la presencia de muchos jóvenes en el recinto. Notimex abordó al especialista en música francesa y rusa Luis Ausentia Saantojai, quien comentó lo siguiente: "Creo que la OFCM interpretó con abstraído y cabal discurso las correspondencias impresionistas de la hermosa pieza de Debussy, y, asimismo, todo el disimulo del Shostakovich que se burla con sutileza de sus censores en la ?Obertura festiva?".

Tercera llamada. "La consagración de la primavera". Teatro Champs-Élysée, Paris. Mayo 29 de 1913: Uno de los más grandes escándalos de la historia de la música. Se alistó la OFCM a configurar los compases bárbaros, feroces y arcanos complementados con concordias bitonales plagadas de discordancias: Stravinski en una licitación que dio un vuelco radical a la música.

Conductor fervoroso que estimuló a los instrumentistas por los parajes tortuosos de los dos segmentos ("Adoración de la tierra" y "El sacrificio"): efectos percutivos provocadores y violentos (ausencia de sonoridad expresiva) complementados con líneas melódicas superpuestas en mixtura de sonidos fiel a la ruptura stravinskiana.

Destacaron los capítulos "Augurios primaverales", "Juegos de las tribus rivales", "Danza de la tierra", "El sacrificio", "Círculos misteriosos de las adolescentes" y "Danza sagrada". La OFCM logró configurar un torbellino orquestal de rugoso y virulento pacte armónico-rítmico.

Presencia (interludio de la segunda parte) de progresiones que serán determinantes, años después, en Ravel ("Bolero", 1928). "Stravinski es el mecanismo convertido en música", escribió el crítico musical del influyente rotativo "New York World", Deems Taylor. Las glosas instrumentales de la OFCM se convirtieron en axiomáticas: confirmación de los valores futuristas de una composición que, a cien años de su primera exposición, no deja indiferente a nadie.

Aclamación general. Fervoroso tributo de José Areán y la OFCM a Igor Stravinski. El fin de semana pasado abrigó la fiereza de una música insidiosamente hermosa: provocativamente ineludible.

Se notificó el próximo programa (sábado 25, domingo 26 de mayo): "Romeo y Julieta", de Chaikovski, "Danzas polovetsianas", de Borodin, y "Sinfonía No. 5", de Prokofiev. Imposible dejar de asistir a semejante convite.

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