Bangkok, 17 jun (EFE).- El Gobierno de Tailandia anunció este viernes el fin del uso obligatorio de las mascarillas en exteriores y relaja las restricciones contra el coronavirus para la entrada de viajeros extranjeros, con las que confía en reactivar el turismo en el país, uno de los grande motores de la economía.
Las autoridades del Centro para la Administración de la Situación Covid-19 señalaron en una rueda de prensa en Bangkok que los tapabocas dejarán de ser obligatorios a partir del 1 de julio próximo en los exteriores de todo el país, que registra hasta el momento más de 30.000 muertos y unos 4,4 millones de infectados por el patógeno desde el inicio de la crisis sanitaria, en 2020.
Asimismo, desde julio los viajeros extranjeros quedarán exentos de rellenar un formulario en linea antes de su ingreso al país.
Las autoridades tailandesas igualmente anunciaron que levantarán la exigencia de control de la temperatura en los aeropuertos y la presentación de un seguro sanitario con requisitos específicos referentes a la covid-19.
Desde el pasado 1 de mayo, los viajeros inmunizados que llegan al país asiático ya están exentos de guardar un periodo de cuarentena y pueden entrar con el certificado de vacunación, mientras que las personas no vacunadas permanecen obligadas a presentar una prueba PCR negativa para la enfermedad.
La creciente flexibilización de las restricciones acompaña la tendencia a la baja de la pandemia en Tailandia y busca impulsar la reapertura económica del país, cuyo sector turístico ha sido fuertemente golpeado por la emergencia sanitaria.
Uno de los destinos turísticos más visitados en el mundo, Tailandia recibió el año pasado unos 428.000 turistas extranjeros, lo que supone una reducción de un 93,6 % frente a los casi siete millones de visitantes que tuvo en 2020, de acuerdo a los datos del Ministerio de Turismo y Deportes.
El sector turístico responde además por entre un 12 % y 20 % del producto interior bruto (PIB) del país.