Paris, Francia, 24 Ene 2024.- (depositphotos) Más de 500 piezas del Templo Mayor mexicano, la mayoría nunca expuestas fuera de México, serán expuestas a partir del 3 de abril en París, informaron este miércoles los organizadores.
"Mexica. Dones y Dioses en el Templo Mayor" es una "exposición sin precedentes en la historia de la arqueología mesoamericana" detalla la nota de prensa del Museo Quai Branly de París, especializado en artes indígenas.
"Son aproximadamente unas 500 piezas en total, y tres cuartas partes nunca han sido mostradas fuera de México", explicó a la prensa Fabienne de Pierrebourg, responsable de las colecciones del continente americano del museo.
"Mexica" es el nombre de la exposición, "porque así se llamaban así mismos los aztecas", recordó la experta francesa.
El imperio mexica controló el corazón del México actual desde el siglo XIV aproximadamente hasta su derrocamiento a manos de los españoles, en 1521.
La base de la exposición son las excavaciones que aún prosiguen en el Templo Mayor y sus alrededores, desde su sensacional descubrimiento, el 21 de febrero de 1978.
La exposición en París describe la riqueza y complejidad de esa civilización a partir de las ofrendas.
"Esta exposición permite presentar los conocimientos más recientes, en particular sobre sus creencias", añadió Fabienne de Pierrebourg.
Destaca la presentación, durante solamente los dos primeros meses de la exposición, del original del Codex Borbonicus, conservado en la Asamblea Nacional francesa.
Entre 1978 y 2022 se hallaron 209 ofrendas en el Templo Mayor, y los descubrimientos continúan, recordó Steve Bourget, otro de los comisarios de la exposición.
Esas ofrendas eran "un compromiso entre los hombres y los dioses" que debe ser renovado, recuerda constantemente Fabienne de Pierrebourg.
A partir de esos hallazgos, que incluyen estatuillas, animales enteros (como un cocodrilo o un lobo) o restos de sacrificios humanos, la exposición explica toda la cosmovisión mexicana.
Los visitantes podrán contemplar un altar reconstruido.
El único precedente de esta exposición data de principios de los años 1980, cuando París albergó una muestra de las primeras excavaciones del Templo Mayor.