Durante su carrera como empresario, el ingeniero agrónomo llevó de la mano el negocio familiar con la ciencia, así halló un extracto polifenolico de uva tinta, el cual usa en la creación de productos de nutrición y cosméticos.
Los polifenoles son moléculas neutralizadoras, capaces de retardar o prevenir la oxidación de las células, que se encuentran de manera regular en la piel de las uvas moradas.
En el ser humano, los polifenoles son parte del sistema antioxidante celular, no obstante, el sedentarismo, grasas saturadas, exposición excesiva a luz UV, tabaco, entre otros, pueden hacer necesaria la ingesta de suplementos que retrasen la oxidación.
El también fundador de grupo Matarromera inició su investigación con base en estudios científicos previos sobre el vino, que señalaban los beneficios de ingerir una copa al día, como mejoramiento circulatorio de la sangre, reducción de enfermedades cardiovasculares, entre otras.
“Aquello que se descubrió es porque la uva tiene polifenoles, antioxidantes naturales que genera para protegerse de la luz ultra violeta, mosquitos, del excesivo calor y frio”, comentó el viticultor.
En entrevista con Notimex, Carlos Moro destacó que la mayoría de polifenoles vienen de la cascara de la uva (hollejo), por lo que en un principio llevó a cabo la caracterización y extracción de este a nivel laboratorio dentro de la bodega Emina, de la cual proviene el nombre comercial del antioxidante, Eminol.
“Después montamos una planta industrial única en el mundo con tecnología propia para extraerlo. Patentamos todo el proceso a nivel mundial”, apuntó.
Con toda la nueva industria casi terminada, Carlos se dio a la tarea de demostrar la funcionalidad del producto, para ello su grupo de investigadores realizó varias publicaciones científicas en las revistas de mayor renombre dentro del área.
“Hicimos estudios médicos en dos de los hospitales más importantes de España, Hospital Puerta de Hierro, y el Hospital Txagorritxu del país Vasco, para demostrar en que tenían utilidad estos productos, que denominamos como marca Eminol”, detalló Moro.
Los resultados de las investigaciones arrojaron que el Eminol tiene efectos positivos, uno de ellos, dijo Carlos, es la capacidad de reducir el colesterol, cuyo hallazgo se dio luego de trabajar con gente que presentaba una ligera hipercolesterolemia, misma que lograba reducir su padecimiento de forma sustantiva.
El extracto Eminol procedente de la uva tinta Tempranillo contiene polifenoles como flavonoles, ácido elágico y gálico, antocianos, catequina y epicatequina, entre otros. La capacidad antioxidante contenida en cada cápsula es 180 veces mayor a de su de origen fruto.
Carlos Moro explicó que el desarrollo del producto inicia con la elaboración tradicional del vino que del total de la producción ocupa cerca del 70 por ciento y 14 por ciento se queda en la madera. El restante es de cascaras y pepita donde se encuentra 65 por ciento de los polifenoles.
Después, la materia prima es llevada a la planta de extracción de polifenoles, donde recibe un tratamiento orgánico, para luego convertirse en las capsulas, que de acuerdo a Carlos Moro, mejoran la capacidad oxidativa de la sangre, evitan la acumulación del colesterol en arterias.
Como parte complementaria a los antioxidantes internos, Moro siguió de manera paralela otra línea de investigación, la de los productos para la belleza, a fin de reforzar la parte externa de los consumidores.
Entre la gama de artículos para el cuidado de la piel femenina y masculina, cuyo principio activo tienen la uva tinta, pepita de uva verdejo, aceite de pepita de uva, agua de uva y Eminol, se encuentran cremas de hidratación, antiedad, exfoliantes, entre otros.
Moro destacó que su principal ventaja con el resto de los competidores es que para la elaboración de ambas líneas de utiliza sus propias uvas, “de todos los productos, podemos decirle a la gente de que parcela viene esa pastilla que se está tomando”.