Sin embargo, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advirtió que a pesar de los avances, el impulso mundial frente ala resistencia a los antimicrobianos (AMR) está aún en su etapa inicial.
Hay puntos débiles que deben reforzarse, en especial en los sectores alimentarios y agrícolas de los países de ingresos bajos y medios, donde se libra la batalla decisiva contra las "superbacterias" resistentes a los medicamentos convencionales.
Consideró que se debe respondera las "lagunas" que existen en la información sobre dónde, cómo y en qué medida se utilizan los antimicrobianos en la agricultura, al tiempo que hay que fortalecer los sistemas e instalaciones nacionales para rastrear la ocurrencia de la AMR en los sistemas alimentarios y el medio ambiente.
"Recordó que los medicamentos antimicrobianos son muy usados en los sectores ganadero, avícola y acuícola para tratar o prevenir enfermedades, e incluso como promotores del crecimiento".
Sin embargo, su uso excesivo e indebido impulsa la aparición y propagación de patógenos causantes de enfermedades que son resistentes a los antibióticos y por ello cada vez más difíciles de tratar, se indicó en el primer estudio anual sobre los planes nacional frente a la problemática, realizado en 2016.
El análisis realizado por la FAO, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) concluyó que más de seis mil 500 millones de personas -o más del 90 por ciento de la población mundial- viven hoy en países que tienen ya o están desarrollando un plan de acción nacional para abordar la cuestión.
En el reporte se destacó que casi todos ellos abarcan a la vez la salud humana y animal en línea con el enfoque multisectorial de "Una salud".
De acuerdo con la FAO, desde la realización de ese informe, hay más países que han avanzado hacia la finalización de sus planes o los han vuelto plenamente operativos.
El último en haber presentado un plan de acción nacional para hacer frente a la propagación de la resistencia a los antimicrobianos (AMR) utilizando un enfoque de "Una salud" ha sido Kenya, que puso en marcha esta semana su política y su plan de acción nacional frente a los antimicrobianos.
Kenya es uno de los 12 países africanos y asiáticos que participan en un proyecto de la FAO, -financiado por el Fondo Fleming del Reino Unido- para desarrollar la capacidad nacional de seguimiento y respuesta frente a los riesgos de la AMR en la alimentación y la agricultura.